Este viernes dará comienzo el juicio por el crimen de Andrea Costa, que sienta en el banquillo a David José R.P., apodado el Adoptado, junto a Juan Felipe A.V. y su hermana, Estefanía Pino A.V. Todos ellos se enfrentan a una petición de condena de 15 años de cárcel por la comisión de un delito de homicidio —en el caso de la mujer, como cooperadora necesaria—.
El presunto homicidio se perpetró el 11 de septiembre de 2021 en Vecindario y, posteriormente, según las acusaciones, trasladaron el cadáver de la víctima en su propio vehículo hasta Pozo Izquierdo, donde lo quemaron para eliminar pruebas.
El juicio estará presidido por el magistrado Arcadio Díaz Tejera, quien tendrá la misión de dar forma jurídica al veredicto que dicte el jurado popular. La primera sesión se celebrará este viernes, a partir de las 9.30 horas, en una jornada en la que se seleccionará a los miembros titulares y suplentes del jurado, se procederá a la lectura de los escritos de acusación y defensa, y se presentarán los informes de las partes. Ya el lunes se llevará a cabo la práctica de la prueba, con las declaraciones de los acusados.
Los hechos
La Fiscalía Provincial de Las Palmas considera que David José R.P., el Adoptado, junto a Juan Felipe A.V. y Estefanía Pino A.V., son los responsables de un homicidio que tuvo lugar el 13 de septiembre de 2021 en Vecindario (Gran Canaria). A la víctima, Andrea Costa, la mataron en una casa a golpes y asfixiándolo y luego llevaron su cuerpo a Pozo Izquierdo dentro de su propio coche, donde lo quemaron. A los tres se les imputan cargos por homicidio y cooperador necesario y, además de la prisión, le exigen el pago conjunto y solidario de 180.000 euros para la familia de la víctima.
Según el escrito de acusación realizado por la fiscal Marisol Vidal, los acontecimientos comenzaron la noche del sábado 11 de septiembre de 2021, cuando el grupo, compuesto por los acusados y la víctima, el italiano Andrea Costa, decidió acudir al restaurante japonés Sakura III en Playa del Inglés. En el transcurso de la noche, según se detalla, los acusados habían consumido estupefacientes y bebidas alcohólicas, y acudieron al local en el vehículo Lancia Ypsilon propiedad del fallecido.
Tras cenar y con la intención de no pagar la cuenta, el Adoptado Juan Felipe y Estefanía Pino, insiste esta parte, abandonaron a la carrera el establecimiento dejando solo a Andrea, quien no tenía dinero para pagar. Cuando el personal del restaurante advirtió esta situación, llamaron a la Policía, que acudió al lugar e interrogó a Andrea. Este suceso, aparentemente menor, fue el desencadenante de un conflicto mayor: al salir del restaurante, Andrea fue visto por sus acompañantes hablando con los agentes, que lo identificaron, lo que sembró la sospecha en el Adoptado y sus amigos de que podría denunciarlos.
Tras marcharse del local, Andrea condujo el coche con el resto de acompañantes y se desplazaron al domicilio de David José el Adoptado, en Vecindario. Allí, según describe la Fiscalía, se desató una brutal agresión contra Andrea, en un acto que habría sido motivado por la sospecha de que este pudiera haber colaborado con las autoridades y puesto en riesgo al grupo.
En el interior de la vivienda, David José y Juan Felipe comenzaron a insultar a Andrea, dirigiéndole frases como «hijo de puta» y «mentiroso» mientras lo golpeaban violentamente. La situación escaló rápidamente cuando ambos hombres condujeron a Andrea, entre empujones y golpes, hacia una habitación en el fondo de la casa.
Estefanía Pino, según la acusación, participó de forma indirecta en la agresión. En un momento dado, y consciente de lo que estaba ocurriendo, ella accedió a facilitar una sábana que, acto seguido, rompió en pedazos y entregó a sus compañeros, quienes utilizaron estos fragmentos para atar a Andrea. Con sus manos y pies inmovilizados, la víctima fue golpeada en repetidas ocasiones en el suelo, mientras David y Juan Felipe intensificaban la agresión. En la fase final, presuntamente uno de los acusados se subió sobre la espalda de Andrea mientras el otro le presionaba el cuello con otro pedazo de sábana, hasta causar la asfixia de la víctima.
Al amanecer del lunes 13 de septiembre, el cuerpo de Andrea fue hallado dentro de su propio coche, el Lancia Ypsilon, en una zona de invernaderos en Pozo Izquierdo. Los restos del vehículo, completamente calcinado, complicaron las primeras labores de identificación de la víctima. De acuerdo con los informes de autopsia, Andrea presentaba múltiples fracturas en la zona costal, especialmente en el tórax, así como una rotura nasal que habría contribuido a una asfixia severa, exacerbada por el sangrado intenso que obstruyó las vías respiratorias.
Los forenses describieron heridas consistentes con un episodio de violencia extrema: fracturas costales en ambos lados del pecho, una fractura nasal, y signos de asfixia provocada por presión tanto externa como interna en las vías respiratorias. Estas lesiones apuntan a una intención deliberada de terminar con la vida de Andrea, en un acto que el Ministerio Público ha calificado como homicidio sin circunstancias modificativas de la responsabilidad criminal.
El Ministerio Público destaca también los antecedentes penales de los acusados, especialmente del Adoptado, quien cuenta con condenas previas por delitos de lesiones y robo con fuerza. Por su parte, Juan Felipe Alemán Vega también ha sido condenado en el pasado por robo.
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