
Soraya García, vicerrectora de Formación Permanente
Las microcredenciales llegan a la ULPGC: «Son el futuro de la universidad»Secciones
Servicios
Destacamos
Soraya García, vicerrectora de Formación Permanente
Las microcredenciales llegan a la ULPGC: «Son el futuro de la universidad»D.P.
Las Palmas de Gran Canaria
Domingo, 30 de marzo 2025
La «revolución» está próxima a llegar a la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC). Lo hará de la mano de las microtitulaciones o microcredenciales, que son formaciones específicas que se imparten en un período corto de tiempo, con la gran ventaja de que cuentan con reconocimiento europeo. La institución espera comenzar a ofertarlas el próximo junio, con la intención de que se puedan cursar desde ese mismo mes.
Así lo expone Soraya García, vicerrectora de Formación Permanente, un área nueva en la ULPGC que lleva el proyecto, aunque antes ya se cocinaba desde el vicerrectorado de Títulos, con Luis Hernández al frente. «El futuro de la universidad pasa por las microcredenciales», resume García sobre este novedoso modelo de formación superior.
«Son pequeñas formaciones que pueden ir desde tres ECTS —sistema europeo de transferencia y acumulación de créditos, en español— hasta menos de 15 ECTS, que buscan responder de manera rápida a la demanda social y empresarial, respecto a la formación de distintos colectivos profesionales, y que tienen reconocimiento europeo», ahonda la vicerrectora.
La idea es que las microcredenciales se impartan en períodos breves de tiempo, como pueden ser dos semanas. En todo caso, matiza García, no rebasarían los seis meses de duración. Otro aspecto a destacar es que pueden optar a ellas tanto titulados universitarios como no titulados. Esto las convierte en una herramienta perfecta para la recualificación o reorientación de perfiles ya profesionales. También, para que los recién egresados continúen cultivándose.
La vicerrectora lo ejemplifica con un caso concreto: «Todas las empresas necesitan ahora conocimientos en ciberseguridad o en inteligencia artificial (IA), este modelo formativo es perfecto para cubrir esa demanda».
Considera que muchos grados evolucionarán a este tipo de formación «en un futuro a muchos años». Algunos no, como Medicina o Ingeniería en Obras Públicas, que mantendrían el formato actual debido a todo el conocimiento que exigen. «Es casi el modelo americano, que funciona así, a través de créditos que vas haciendo. Tú vas haciendo los cursos que te da la gana, pero si haces el 1, el 17, el 14 y el 15, te doy un título», compara.
Lo cierto es que el Ministerio de Universidades aprobó el año pasado el Plan Microcreds, que regula este tipo de formación y está financiado con fondos europeos, y ya son varias las instituciones españolas que lo ofertan. No es el caso de las canarias, pues el Gobierno autonómico no lo ha puesto aún en marcha; se espera que lo haga en unos meses. «Hay autonomías muy avanzadas, la nuestra va más retrasada, no en sí misma, sino con respecto a otras», aclara la vicerrectora.
La implementación de las microcredenciales requiere, a su vez, de un sistema de garantía de calidad, para que pueda contar con el reconocimiento europeo, algo en lo que se encuentra inmersa la ULPGC. «Todo esto se va a llevar por agencias de evaluación, que se asegurarán de la calidad de lo que se está impartiendo. Agradezco mucho todo el trabajo activado por el vicerrector Luis Hernández, porque ya tenemos el reglamento oficialmente publicado y unas pautas muy claras a seguir, marcadas no solo por el Ministerio de Universidades, sino que también por Europa», enfatizó Suárez.
Soraya García
Vicerrectora de Formación Permanente
La universidad trabajará primero en la oferta de sus títulos propios como microcredenciales, las que espera impartir desde el próximo junio. Su equipo ya tiene en mente algunas áreas donde se dará la reconversión, como Reparación naval, Puertos, Costas, Biblioteconomía, Oceanografía, Asesoría fiscal o Gestión empresarial inteligente.
Para una segunda fase elaborará un catálogo que responderá a necesidades recogidas por el Servicio Canario de Empleo, el Gobierno canario o el Cabildo grancanario, que tardará un poco más en «revolucionar» la formación superior.
Las microcredenciales o microtitulaciones mantienen emocionada a la comunidad educativa por la cantidad de posibilidades que ofrecen. En una de ellas ya ha trabajado la ULPGC: «Es la revolución que ya ha llegado», adelanta el vicerrector de Títulos, Luis Hernández.
«Hemos diseñado un máster, que no lo hemos hecho conforme a lo que creemos que necesita el mercado laboral, sino a demanda de una federación, que se ha reunido para identificar lo que echa en falta. Por ejemplo, formación en ciberseguridad y en IA», reseña.
Hasta ahí, todo normal. La novedad viene en que, desde la universidad, se ha propuesto ofertar esta formación como un máster convencional para los recién titulados de grado, mientras que las plazas sobrantes como microcredenciales para los profesionales de esa federación.
La iniciativa está ahora en manos del Gobierno de Canarias y la ULPGC se mantiene a la espera de si la aprueba o no. «De hacerlo, será lo más novedoso que tendremos en Canarias», enfatiza el vicerrector, quien asegura que en el resto de España solo se está impartiendo esta suerte de híbrido en una universidad en Madrid. «Lo han ofertado al mismo tiempo como microcredencial y máster, ahora mismo vamos a hacer pioneros», pone de relieve.
Hernández contempla esta posibilidad con entusiasmo, pues una misma clase aunaría a perfiles de estudiantes variopintos: a alumnado recién egresado y a profesionales con rodaje en el mercado laboral.
«Pones a trabajar juntos a esa gente que viene a actualizar conocimientos con esos chicos que vienen con sangre nueva y ambos encuentran respuestas. No solo se hace la magia con este formato, sino que es una verdadera bomba», sintetiza.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.