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Miércoles, 3 de octubre 2018, 07:16
LORETO GUTIÉRREZ / MADRID
El secretario general del PSOE canario, Ángel Víctor Torres, salió ayer del ministerio de Fomento «contento con el buen trabajo» de los Gobiernos central y autónomo en la negociación del convenio de carreteras, pero sin poder anunciar una fecha concreta para su firma, requisito necesario para que el Estado transfiera a Canarias los 307 millones de euros consignados en los Presupuestos de 2018.
Tras mantener una reunión con el ministro José Luis Ábalos, que acabó bien entrada la noche por el retraso del titular de Fomento en la vuelta de su viaje a Cantabria, Torres se limitó a reiterar que el convenio se firmará «cuando el Gobierno de Canarias y el estatal se pongan de acuerdo sobre los documentos que se han intercambiado en las últimas semanas». En todo caso, el líder de los socialistas isleños aseguró que pese al retraso, los 317 millones recogidos en las cuentas estatales «están garantizados hasta el último céntimo».
Se refirió Torres a la complejidad de dar forma a los tres acuerdos pendientes de firma -el nuevo convenio 2019-2024, el cumplimiento de la sentencia por impago y la adenda de obra ejecutada- y atribuyó la dilación al «imperativo legal» de que Canarias corrigiera algunos aspectos y se justifiquen de la mejor manera posible las partidas para que no computen como regla de gasto. «No ha sido una imposición de Fomento», asegura.
INTERLOCUTOR DIRECTO. El líder del PSOE canario, que ha asumido el papel de interlocutor directo con el Gobierno de Sánchez, está llevando a cabo una gira por varios ministerios con la intención de «conocer cómo van los asuntos canarios» y buscar algún compromiso concreto para amortiguar la creciente escalada dialéctica entre el Ejecutivo regional y el Estado a cuenta del retraso de los convenios, pero también para calmar las aguas internas e insuflar tranquilidad a las propias filas socialistas, en las que empieza a cundir el desconcierto -y en algunos casos el malestar- por las evasivas del Gobierno estatal.
No es la primera vez desde que Sánchez llegó a la Moncloa que Torres tiene que actuar de apagafuegos. Ya lo hizo cuando a principios del mes de julio se desató la polémica sobre el plazo de aplicación de la subvención del 75% a residentes en los viajes a la Península, tras el anuncio inicial de Ábalos de que podría tardar hasta seis meses en aprobarse pese a estar recogido en los Presupuestos de 2018. La presión política y social llevó entonces a Fomento a buscar una solución por la vía del real decreto que finalmente permitió la entrada en vigor del descuento aéreo solo una semana después de las cuentas estatales.
Las expectativas sobre el convenio de carreteras se vieron frustradas por enésima vez la semana pasada con la cancelación de la visita que el ministro Ábalos tenía previsto realizar a Tenerife el último sábado de septiembre, después de que fuentes cercanas a la negociación hubieran apuntado la posibilidad de que iba a aprovechar la ocasión para anunciar la fecha de la firma. Los propios socialistas canarios asumen que no tenía mucho sentido que el ministro de Fomento viajara a Canarias si no era para fijar un calendario, sobre todo porque en su anterior visita a las islas se comprometió a dar una fecha concreta antes del 30 de septiembre.
A tres meses de que acabe el año hay más de 500 millones de euros bloqueados solo en el actual ejercicio por el retraso en la firma de los convenios bilaterales pendientes.
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