Un dron ruso impacta en la central de Chernóbil y daña el sistema antifugas radiactivas

Sin embargo, horas después las autoridades ucranianas comprobaron que la estructura estaba dañada. «La barrera que debía impedir la propagación de sustancias radiactivas ha dejado de funcionar según su diseño original», declaró Oleksandr Tytarchuk, ingeniero jefe de la central. El dron había perforado la vasija de contención.

«En este momento, los niveles de radiación no han aumentado y están siendo evaluados constantemente. Según las evaluaciones preliminares, el daño en la estructura de protección es significativo», ha publicado el presidente de Ucrania en la red social X. A pesar de la negativa de las autoridades del país sobre un riesgo real para la población, cunde la preocupación entre quienes viven en el entorno de la central.

Zelenski ha acusado directamente a Rusia, a la que ha calificado de «amenaza terrorista para el mundo entero». Denuncia que cada noche lleva a cabo este tipo de ataques contra la infraestructura y las ciudades de Ucrania. «Esto significa que, definitivamente, Putin no se prepara para negociar, se prepara para seguir engañando al mundo», ha añadido. Exige más presión internacional sobre el jefe del Kremlin, justo ahora que Donald Trump ha anunciado el inicio de las negociaciones para la paz en Ucrania «de inmediato».

La respuesta de Moscú ha llegado en boca del portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, quien desvincula a Rusia del ataque y ha calificado las acusaciones de Zelenski como una provocación y una invención de las autoridades ucranianas. «El ejército de Rusia no hace estas cosas. Lo más probable es que estemos hablando de otra provocación, de una falsificación. Es lo que le gusta al régimen de Kiev y a veces no duda en hacerlo», ha manifestado.

El Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) ha confirmado la colisión contra la estructura que protege los restos del antiguo reactor 4, que quedó destruido en la explosión que provocó el peor accidente nuclear de la historia en 1986. El suceso ha tenido lugar a las 1.50 hora local, cuando una aeronave no tripulada ha impactado contra el tejado del sarcófago, provocando un incendio que ya ha sido extinguido.

El OIEA no ha detectado hasta el momento tampoco un aumento de la radiación. «En este momento, no hay indicios de que se haya producido una brecha en la contención interior del sarcófago. Los niveles dentro y fuera siguen siendo normales y estables. No se ha informado de víctimas. El OIEA sigue supervisando la situación», ha especificado la agencia de la ONU.

Según ha detallado, un equipo de la agencia en el lugar escuchó una explosión durante la noche procedente del sarcófago que causó un incendio y fue informado de que un vehículo aéreo no tripulado -un dron- había chocado contra el tejado. Efectivos de seguridad antiincendios y vehículos respondieron «en cuestión de minutos».

El jefe de la oficina de la presidencia ucraniana, Andrí Yermak, ha anunciado que representantes de Kiev proporcionarán «mucha información» a EE UU sobre este incidente. «Hoy les daremos mucha información a nuestros socios estadounidenses sobre el ataque de Rusia a la central nuclear de Chernóbil, sobre cómo lanzan constantemente drones sobre la zona de exclusión de Chernóbil, sobre la amenaza que esto supone para la estructura de protección y para la seguridad nuclear», ha indicado.

Estos sucesos tienen lugar dos días después de que Kiev y Moscú intercambiaran acusaciones en torno a la suspensión de una rotación de personal del OIEA en la central de Zaporiyia, ocupada por tropas rusas desde el inicio del conflicto. Desde el comienzo de la invasión rusa la agencia de la ONU viene advirtiendo del riesgo de un grave accidente nuclear por los combates y ataques en torno a las instalaciones atómicas ucranianas.

Para Rafael Grossi, director general del OIEA, el ataque contra la central de Chernóbil, que Ucrania atribuye a Rusia, y el aumento de la actividad militar en Zaporiyia «ponen de relieve los persistentes riesgos para la seguridad nuclear». «No hay margen para la complacencia y el OIEA sigue en alerta máxima», ha trasladado.