Hace años intenté hacer un roscón de Reyes y el desastre fue supino. Me costó mucho conseguir los ingredientes para la masa, intenté incluso escarchar las frutas por mí misma y, como dato importante he de decirles que, por aquel entonces, sumaba 15 añitos.
Casi le prendo fuego a la cocina de mi madre y el roscón resultante podía ser más un arma de defensa personal que un bocado comestible. Dicho esto, jamás ni nunca he intentado volver a hacer un roscón.
No se crean, la espinita sigue ahí, pero, entre que las fechas son muy propias para ir con falta de tiempo y que, cada vez los hacen más ricos y tenemos una más que variada oferta a lo largo y ancho de Gran Canaria, pensaba yo que jamás iba a ponerme a hacerlo, pero de pronto abrí el calendario de 2024, limpito, nuevo, sin apuntes ni tachones y volvió el sueño recurrente de mi primera semana del año por intentarlo de nuevo, así que, abrí libros y busqué cómo hacer roscones.
Desistí en el segundo libro que abrí y, a la mañana siguiente de dar la empresa por perdida, escuché en la radio que alguien contaba que, para los que no nos atrevemos con esas masas más complicadas o sencillamente nos pueda parecer pesado el roscón tradicional. después de venir más que saturados de comer mucho durante todas las navidades, estaba la versión en hojaldre. Más ligera, mucho más sencilla de hacer y, en apariencia, un roscón de Reyes como manda la tradición.
Después de tantas vueltas este año he desclavado la espinita, aunque continuaré en mi empeño por hacer el roscón de toda la vida. Pero, que sepan, que este está muy pero que muy bueno.
2 masas de hojaldre frescas, a ser posibles redondas.
500 ml de nata para montar
1 cucharada de queso crema
110 g de azúcar glas
1 huevo
Un chorrito de leche
30 g de almendras en grano
Paso 1
Comenzaremos encendiendo el horno a 190º calor solo por debajo y sin ventilación. Mientras se calienta el horno, prepararemos lo que será la base del roscón. Estiraremos la masa sobre una superficie plana y sobre un papel vegetal para horno. Lo normal es encontrar estas masas en formato rectangular, pero la de Buitoni, ya viene cortada en círculo.
Estiramos la masa
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Paso 2
Mediremos, más o menos el centro del roscón y, con la ayuda de un vaso, haremos el círculo central y cortaremos.
Cortamos un círculo en el centro
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Paso 3
Meteremos tal cual la masa en el horno y horneamos, a la misma temperatura y función, durante 15 minutos.
Mientras tanto iremos montando la nata. Para ello, lo primero que debemos tener en cuenta para que monte bien, es que esté muy fría, yo la meto unos 10 minutos antes de comenzar, en el congelador. Verteremos toda la nata en una fuente amplia.
Vertemos la nata en una fuente
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Paso 4
Añadimos la cucharada de queso crema porque este es un pequeño truco para que la nata no pierda cuerpo, una vez esté montada.
Añadimos la cucharada de queso
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Paso 5
Batimos, con varillas eléctricas se hace más rápido, hasta que comience a espumar.
Batimos hasta que espumee
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Paso 6
Justo en ese momento, añadiremos 100 g de azúcar glas y seguiremos batiendo hasta que la nata quede montada y forme picos.
Batimos hasta montar la nata
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Paso 7
Una vez horneada la base del roscón, dejaremos atemperar y reservamos.
Dejamos atemperar la base
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Paso 8
Seguidamente, prepararemos la segunda masa de hojaldre que será la que nos haga de tapa del roscón y mantendremos el horno encendido. Para ello, dispondremos en una superficie plana el papel vegetal y estiraremos la masa. Como esta será la superficie, la pintaremos con huevo al que añadiremos un chorrito de leche.
Pitamos la superficie con huevo y leche
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Paso 9
Una vez la tengamos pintada, añadiremos sobre la superficie, las almendras granuladas.
Cubrimos con las almendras granuladas
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Paso 10
Introduciremos en el horno durante 16 minutos, con calor solo desde abajo, a 190º y sin ventilador. Una vez horneada dejaremos atemperar unos 10 minutos.
Hormearemos
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Paso 11
Y ya será el momento de comenzar a montar nuestro roscón de hojaldre, para ello, colocaremos la base en una bandeja redonda y plana y le daremos la vuelta al hojaldre, para que nos sea más sencillo.
Colocamos la base vuelta del revés
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Paso 12
Con una manga pastelera y con boquilla estrellada, iremos colocando la nata, en círculos, hasta cubrir la base.
Rellenamos con la nata
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Paso 13
Una vez tengamos el relleno dispuesto, coronaremos con la tapa de hojaldre nuestro roscón.
Cerramos con la tapa
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Paso final
Con los 10 g de azúcar glas restante, espolvoreamos la superficie y a disfrutar de un «casi» roscón de Reyes.
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