El edificio de Vecindario, con 20 pisos de 14 a 45 metros cuadrados

El edificio de la Avenida de Canarias 454 de Vecindario, desalojado el pasado sábado por riesgo de derrumbe, tiene registrado en el Catastro un total de 23 viviendas, un almacén-estacionamiento y dos locales comerciales. De las viviendas, 20 de ellas oscilan entre los 14 y 45 metros cuadrados y todas constan con una referencia catastral propia. La única excepción es la que se encuentra en la última planta, que figura con 190 metros cuadrados al contar con una terraza, pero que a su vez está dividida en almacén y en otras dos casas.

Precisamente en esa terraza, que debería estar libre en parte, es donde se han levantando varias construcciones más gracias a un cerramiento, como puede verse claramente en las imágenes de Google Maps y también desde la propia calle. Por obras irregulares tiene expediente abierto en Disciplina Urbanística.

Según los datos registrados del inmueble, que aparece como construido en 1989, en el sótano o garaje tiene una superficie de 306 metros cuadrados y en la planta baja dos locales comerciales, uno de 276 y otro de 25 metros cuadrados.

El primer piso tiene un total de 12 divisiones, de uso residencial y cada uno estipulado como vivienda, que oscilan entre los 14 y 36 metros cuadrados construidos, mientras que en el segundo hay ocho pisos de entre 19 y 45 metros cuadrados. En el tercero consta un almacén de 20 metros y las dos viviendas con mayor superficie del edificio, de 83 y 56 metros cuadrados.

Sin embargo, todas estos espacios, pese a estar dados de alta como viviendas en Catastro, no garantiza que estén acorde con la legalidad y que se hayan hecho con permisos, ni que dispongan cada una de las denominadas cédulas de habitabilidad por reunir las condiciones mínimas para ser consideradas un espacio en el que se pueda vivir. Los inquilinos de este bloque, desalojados desde el sábado con lo puesto, contabilizaban hasta 25 viviendas, por lo que supuestamente en la terraza podrían haberse levantado al menos dos más.

De momento, estos 45 vecinos siguen sin poder regresar a sus casas, pese a que ya se han concluido los trabajos de apuntalamiento por parte de una empresa especializada contratada por el propietario, conocido como 'el timplista' o el de la 'Rumba', por ser el dueño de la sala de baile en Agüimes, que tiene más denuncias en otros inmuebles.

Por su parte, el Ayuntamiento sigue pendiente del informe técnico que avale la seguridad de la estructura, que conllevará que se pongan en marcha diferentes fases, explica el concejal de Urbanismo, Leví Ramos. La primera sería que los habitantes de los dos inmuebles colindantes puedan regresar, ya que no se han apreciado problemas estructurales, que puedan abrir los locales comerciales contiguos y el tramo de la calle cerrado.

El segundo sería que los arrendatarios del edificio principal puedan acceder para poder retirar los artículos de primera necesidad de una manera escalonada y custodiados.

Y el tercero, que podría demorar, sería la posibilidad de que accedan para trasladar muebles y otros enseres ya que los trabajos para que puedan regresar podrían tardar meses.

Tampoco se conocen las causas que provocaron el colapso del pilar central, que causó un estruendo y que el edificio se moviera como si hubiese tenido lugar un terremoto. Todo ello produjo un hundimiento de la estructura de al menos cinco centímetros y grietas en las paredes.

• Temas
• Santa Lucía de Tirajana
• Vecindario
• Casas
• Google maps