Un agente de 37 años, primera víctima de las fuerzas de seguridad

Primera víctima mortal por coronavirus entre las fuerzas de seguridad del Estado. Pedro Alameda, que trabajaba destinado en el Servicio de Retribuciones de la Guardia Civil en Madrid, es el primer miembro del instituto armado a causa de la pandemia. El agente, que contaba 37 años y tenía una hija de tan solo cinco años, era además un conocido miembro de la Junta Directiva Provincial de la delegación de Asociación Unificada de Guardia Civil en Madrid.

El funcionario, que carecía de patologías previas y antes de contraer la enfermedad prestaba su servicio con normalidad y sin ningún tipo de limitación llevaba ingresado varios días con pronóstico grave en el centro hospitalario Quirón de Alcorcón.

«Desde la familia de AUGC queremos expresar nuestra desolación ante esta tragedia, que se une a la de las más de quinientas familias en España que han perdido a un ser querido ante esta epidemia. No nos cabe sino mostrar todo nuestro afecto y apoyo a su familia y a todos los allegados de Pedro y volver a recordar a toda la ciudadanía que cumpla a rajatabla las medidas establecidas por el Gobierno para tratar de atajar esta amenaza sin precedentes», ha apuntado la asociación profesional a la que pertenecía.

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