El Químico le dijo a Fermín: «Es imbécil este hijo de puta»

El Químico tenía una amplia experiencia en elaborar psicotrópicos, anabolizantes y esteroides y aprovechó su amistad con el agente de policía para montar presuntamente con total impunidad tres supuestos laboratorios, concretamente en Ayagaures, el barranco Hoya la Negra y en la calle Juan Rejón, estos dos últimos situados en el municipio de Santa Lucía.

Según los investigadores, el belga contactó en septiembre de 2018 con el Platanito para que éste le ayudara a introducir una importante cantidad de droga en la isla haciendo uso para ello de su velero. Fue el primer contacto detectado entre ambos por los agentes y que tuvo continuidad un mes más tarde cuando, nuevamente, el belga habló con el Platanito para venderle una elevada cantidad de droga que había elaborado en uno de sus laboratorios. Evaristo la comercializaría posteriormente a través de varias personas de su confianza. «Aquí tengo seis cositas bonitas», le dijo el belga al Platanito refiriéndose a la droga, en una reunión mantenida entre ambos el 5 de febrero de 2019 y que fue captada por los investigadores.

Todo iba rodado para esta presunta organización criminal hasta que se produjo la detención del Platanito después de sufrir un accidente de tráfico en el que falleció una persona. Los agentes le incautaron en ese momento los 4,2 kilos de metanfetamina que compró supuestamente al Químico y que tenían un valor de mercado de 114.540 euros.

A raíz de la detención, el Químico se reunió con Fermín el policía en dos ocasiones –el 22 de febrero y el 28 de marzo– para, visiblemente preocupado, pedirle que mirase en el registro policial si el Platanito y su pareja –que presuntamente estaba al tanto de todo– estaban siendo investigados y sus teléfonos estaban pinchados. «Te voy a dar un número que tienes que mirar urgente», le dijo, a lo que Fermín le respondió: «¿Es un perjuicio para nosotros?», dijo. «Nunca hablamos de cosas raras pero quiero saber si tienen mi historial o algo así, si ha estado mirado o si no», añadió Ivo. «Mi socio le entregó –al Platanito– seis piezas y todo bien, tranquilo, y tenía un tío para mirar la carretera {...}, le dijeron que había un control y arrancó como un loco y se metió en la trampa», explicó indignado.

«Se fue él solo a la boca del tiburón, está loco tío», le espetó Fermín, a lo que respondió Ivo que «cogió seis piezas buenas y con dos se hizo un cambio para el BMW con el que mató a ese señor. Basura, imbécil, tonto hijo de puta y loco muerto de hambre», gritó irritado el Químico dentro del Audi Q7 de Fermín.

La Operación Fermín se dio a conocer en el pasado mes de enero después de que un equipo formado por Asuntos Internos y la Udyco de la Policía Nacional, el ECO de la Guardia Civil y Vigilancia Aduanera, detuviera a 17 personas relacionadas con delitos como el narcotráfico, blanqueo de capitales o la extorsión. Todos ellos tenían, presuntamente, como nexo de unión al agente de la Policía Nacional Fermín C. V. R. una especie de «conseguidor», según los investigadores, que ofrecía protección y vigilancia a los narcos aprovechándose de su condición de agente de la autoridad, e incluso participaba en los supuestos negocios oscuros de las cuatro tramas delictivas diferentes detectadas por las autoridades.

Los investigadores intervinieron 1.300 kilos de hachís, nueve de anabolizantes, seis de MMDA metanfetamina, cuantioso material para la producción y síntesis de sustancias psicotrópicas, cerca de 50.000 euros en efectivo y comprobantes de giros postales por valor de más de 900.000 euros. Para ello, los agentes realizaron decenas de seguimientos a los investigados durante más de un año.

El Platanito es un viejo conocido de las autoridades policiales y judiciales y fue condenado el 12 de febrero de 2001 a 20 años de prisión por el asesinato de Sofian Amar Mohamed, un ceutí de 19 años que murió de un disparo en 1999 durante las fiestas de El Tablero (Maspalomas). La sentencia determinó que el acusado «cooperó en la ejecución», de Sofian, de tal forma que sin él no se habría cometido el asesinato. Tras pegar una paliza al fallecido acompañado de un amigo, Evaristo agarró a la víctima y gritó al otro que le disparase con una escopeta que le había entregado previamente. El disparo, tal y como relataron los forenses, fue a bocajarro y alcanzó a Sofian en su corazón.

A esta condena, el Platanito suma otras por los delitos de robo con violencia e intimidación, lesiones, amenazas leves en el ámbito familiar y detención ilegal realizada por un particular, además de que fue detenido junto a su hermano en 1996 portando 76 papelinas de cocaína. También fue investigado por un juzgado de Violencia sobre la Mujer.

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