Aviso rojo por nevadas y fuertes rachas de viento en el norte de Aragón, Navarra y Cataluña

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha emitido este sábado un aviso de nivel rojo, el máximo de las alertas meteorológicas, por nieve y fuertes rachas de viento de más de 100 kilómetros por hora en puntos del norte de Aragón (Pirineo oscense), Cataluña (en el leridano Valle de Arán) y Pirineo navarro. Según la Aemet, en estas zonas se esperan ventiscas y acumulaciones de nieve de hasta 40 centímetros por encima de los 1.200 metros de altitud y algo inferiores entre los 800 y 1.200 metros. El aviso rojo alerta sobre condiciones meteorológicas extremas y exige a la población máxima precaución y evitar los desplazamientos.

Además, la Aemet mantiene los avisos de nivel naranja por viento, nieve o fenómenos costeros en otros puntos de nueve comunidades autónomas, incluidas las tres citadas. Se trata de Aragón, Asturias, Baleares, Cantabria, Cataluña, Galicia, Navarra, País Vasco y Comunidad Valenciana.

Ante la previsión de nevadas en el Pirineo, se recuerda a los conductores que se vayan a desplazar por esa zona que adopten medidas de autoprotección, como llevar cadenas o neumáticos de invierno, además de guantes y manta en el maletero, el depósito de combustible lleno y estén pendientes de los avisos meteorológicos.

Así las cosas, el invierno irrumpe este fin de semana con fuerza en la Península y Baleares con la entrada de una masa de aire ártico por el norte peninsular que va a provocar un descenso notable de las temperaturas, rachas de viento fuerte, precipitaciones y nevadas, lo que se va a prolongar al menos hasta el martes.

A partir de este sábado se intensificará el temporal de nieve, lluvia, viento y mar, que afectará a buena parte de la Península y Baleares. Debido al carácter ártico de la masa que penetrará por el norte peninsular, la Aemet anuncia un descenso térmico «notable» y «nevadas significativas» en la cordillera Cantábrica y especialmente en los Pirineos, donde los espesores pueden alcanzar los 40 centímetros por encima de los 1.200 metros.

La entrada de este flujo de componente norte vendrá acompañada de rachas «muy fuertes de viento», y que podrían superar los 100 km/h en el nordeste peninsular, zonas altas del resto de la mitad norte y en Baleares, sin descartarlas también de forma puntual en zonas altas de la mitad sur. Además, se esperan importantes temporales costeros en el mar Cantábrico desde primeras horas, y en Baleares a partir de la tarde.

Será a partir de mañana domingo 8, cuando esta masa de aire frío se extienda al resto de la Península y Baleares, provocando un descenso térmico generalizado que será notable en amplias zonas. Con ello, las nevadas se extenderán a otros sistemas montañosos de la mitad norte peninsular, siendo probable que afecten también a zonas aledañas de la meseta norte, interior del País Vasco y de Navarra. Se espera que durante este día la cota de nieve se sitúe entre los 700 y 900 metros en el noreste peninsular y los 800 a 1.000 metros en el resto de la mitad norte.

Las nevadas más copiosas se producirán de nuevo en la cordillera Cantábrica y Pirineos, donde se podrán acumular cantidades superiores a los 30-40 cm. Continuará el temporal marítimo en el mar Cantábrico y Baleares, así como el temporal de viento, que se intensificará, esperándose que sea el día álgido de este fenómeno, con rachas que podrán volver a superar los 100 km en el interior de Castellón y sur de Tarragona, Pirineos y zonas altas del resto de sistemas montañosos de la mitad norte peninsular.

Durante el lunes 9, según la Aemet, se espera que continúe este episodio invernal, con cotas de nieve ligeramente más bajas, entre 600 y 900 metros, salvo en el noroeste donde tenderá a subir ligeramente a los 1000-1200 m. Los mayores espesores durante este día llegarán a puntos de la cordillera Cantábrica, donde se podrán de nuevo superar los 30 cm, mientras que en el Pirineo las nevadas irán perdiendo intensidad.

Síguenos en el canal de Whatsapp de Gastronomía de CANARIAS7

A partir del martes 10 es probable que penetre una masa de aire más fría, pero más seca, impulsada por vientos del noreste, de forma que las nevadas irán siendo cada vez menos copiosas, dándose por finalizado este episodio invernal.