La autopsia revela que la mujer presuntamente asesinada por su hijo en Soria sufrió fuertes palizas

No hay signos de sangre o hemorragias, sino moratones por todo el cuerpo, incluida la cara y la cabeza, también fracturas en las costillas. Se descarta muerte por fallo cardíaco y aún se debe determinar si los golpes se produjeron el mismo el día de la muerte o días antes. Los expertos continúan haciendo pruebas.

Mientras tanto, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Soria ordenó ayer el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del hijo de la fallecida, un hombre de 35 años, detenido por la muerte violenta de su madre. Se le investiga por los delitos de homicidio y malos tratos habituales en el ámbito de la violencia doméstica.

El hallazgo del cadáver se produjo en la madrugada del lunes, tras una llamada al 112 que hizo el mismo detenido, para acudir al domicilio de la calle Obispo San Agustín número 2 de Soria donde la Policía Nacional encontró el cadáver de la mujer y en el lugar estaba el hijo de la víctima.

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Los vecinos, según narra El Norte de Castilla, declaran que esa noche no oyeron ruidos pero sí que el detenido es una persona «problemática, relacionada con el consumo de drogas», y que las discusiones eran constantes en la casa.