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El alta médica de 81 ciudadanos extranjeros aislados en la nave del queso provocó un altercado grave este martes que se saldó con la detención de siete personas y la evacuación de un herido leve al Hospital General de Fuerteventura. La Policía Nacional tuvo que intervenir para acabar con la pelea suscitada porque algunos no querían seguir en cuarentena por la covid-19.
En total, son 280 personas llegadas en patera que en este momento están en la nave del queso, también llamado centro de gestión compartida, según los datos de Domingo Fuentes Curbelo, director insular de la Administración General de Estado. Entre ellos, 19 están contagios por la covid-19 y por tanto aislados del resto. Los demás permanecen confinados sólo por tratarse de contactos con estos positivos en estas dependencias situadas en las afueras de Puerto del Rosario, concretamente en la urbanización de Risco Prieto, y que gestiona la Misión Cristiana Moderna.
Una vez pasados los diez días de confinamiento dictaminados por Sanidad durante Semana Santa por un brote en el centro de El Matorral y realizados las dos PCR, el Servicio Canario de Salud procedió el martes a darles el alta a algunos de estos ciudadanos extranjeros, alrededor de 81, momento en el que se produjo el estallido entre las personas de origen senegalés.
Los siete detenidos fueron conducidos ante el juez que dictaminó su puesta en libertad con cargos, aunque seis de ellos nuevamente se detuvieron, expedientados y están pendientes de su traslado a un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) en Gran Canaria o Tenerife donde permanecerán tres meses. El otro ciudadano ejerció su derecho a acogerse al estatuto de refugiado y permanecerá en Fuerteventura mientras se resuelva su petición.
En total, y según los datos del director insular de la Administración General del Estado en Fuerteventura, desde 2018 la isla ha acogido a unas 1.500 personas arribadas en patera. En la actualidad, 612 ciudadanos están acogidos entre el centro de acogida humanitaria gestionado por Cruz Roja en El Matorral y el centro de gestión compartida de la Misión Cristiana Moderna.
Un día antes de la pelea, el Cabildo de Fuerteventura aprobó por la vía de urgencia un acuerdo de cooperación con el Servicio Canario de Salud, para el alquiler de otra nave más donde pasen cuarentena los contactos estrechos de los inmigrantes positivos. De este modo, se descongestionaría la nave del queso y se facilitaría una atención más optima a estas personas.
Aunque no forma parte de sus competencias, el Cabildo ha decidido cooperar con la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias y con el Ministerio de Migraciones.
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