Mi tío Ramón se ha comprado un horno Josper e invitó a la familia el día de Reyes. El horno le ha costado una pasta, ... pero lo ha empoderado como chef. Ahora se cree un cocinero de postín, aunque el cordero le salió seco y la guarnición no pegaba. No por tener un horno Josper eres chef, tampoco eres pintor por tener un pincel ni piloto del Dakar por conducir un todoterreno. Sin embargo, según Elon Musk, cuyas referencias intelectuales son ser el más rico del mundo y consejero mayor de Donald Trump, basta tener un teléfono con cámara fotográfica para ser periodista.
Musk subió un mensaje a X, su red social, que fue visto 105 millones de veces, con la siguiente barbaridad: «Ahora ustedes son los medios». Es decir, basta un smartphone para convertirse en periodista. Aboga, además, por instaurar lo que él llama 'periodismo ciudadano', que consistiría en quitarle a los periódicos tradicionales su valor y su credibilidad para devolverle al pueblo el control de las noticias. Todo esto lo dice un conspiranoico que miente y desinforma, un multimillonario que anima a combatir a las élites con un periodismo de teléfono y ocurrencia.
Para ser periodista no basta un iPhone, también son necesarios el rigor, la transparencia, la responsabilidad, el esfuerzo de contrastar y confirmar. Y luego hay que contextualizar, resistir presiones y contar con verdad para explicar la realidad. Un periodista sabe más que nosotros del tema que trata y eso es inaceptable en el mundo de Musk, donde se desprecia al sabio por elitista. ¡Viva el periodismo sin intermediarios, códigos ni compromisos! La realidad es aburrida y compleja, la mentira es tan divertida, tan simple, tan ciudadana.
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