Bajas fraudulentas

El absentismo injustificado supone para las empresas pérdidas millonarias, que pueden llevar que para un mismo puesto haya hasta tres trabajadores: dos de baja y un tercero ocupando el puesto de los anteriores.

Mención aparte tienen las bajas fraudulentas, que son un porcentaje reducido pero las hay. Hace unos días sin ir más lejos el compañero de CANARIAS7 Jorge Rivero publicaba la información del despido del concejal de Haría por NC, Marcos Lemes, de su empresa, con sentencia del TJSC avalándolo tras confirmar que mientras se prodigaba en mítines y actos políticos con motivo de su candidatura como cabeza de lista de NC para las elecciones de 2023 -donde resultó elegido- estaba de baja por una dolencia que exigía reposo casi absoluto.

Si una persona que ahora es cargo público y al que se le presupone honradez -manejan dinero público de todos n nosotros- es capaz de simular una baja para dedicarse a otros menesteres, qué hará cualquier otra persona que no tiene que dar la cara ante nadie más que sí mismo?

Ahora igual lo que habría que indagar por parte de la inspección del SCS es qué médico o médica fue quien le dio la baja. Ejercer este control en todos los casos demostrados de baja laboral fraudulenta serviría también para cercenar los abusos. Ganan las empresas, gana la Seguridad Social, gana el sector público y ganamos todos los trabajadores, ya que evita que paguen justos por pecadores.