Una sobre el mismo mar

Un siglo después de su creación, durante la I Guerra Mundial, 'Noche de Paz' fue cantada simultáneamente en inglés y en alemán en el transcurso de la conocida como 'Tregua de Navidad', un cese o alto el fuego no oficial en diciembre de 1914 entre los bandos contrincantes a lo largo y ancho de todo el frente occidental.Un alto el fuego navideño que aprovecharon soldados británicos y alemanes para salir de las trincheras y adentrarse, sin armas, en la conocida como 'tierra de nadie', donde se saludaron amistosamente, se intercambiaron alimentos y hasta disputaron algún que otro partido de fútbol. Todo ello llevado a la pantalla en 2016 por Sainsbury's, la segunda cadena de supermercados más importante del Reino Unido, a través de un emotivo corto cinematográfico titulado 'Tregua en tiempos de guerra', aún disponible en el internet/youtube de las cosas y que les animo a visualizar.

7 de diciembre de 1941. Japón bombardea Pearl Harbor, y con dicha acción genera la declaración del estado de guerra por parte de los Estados Unidos, el cual hasta ese instante se había mantenido oficialmente al margen del último gran conflicto bélico mundial, la II Guerra Mundial iniciado tres años antes, el 1 de septiembre de 1939.

Un año después del ataque aéreo japonés a la flota americana, el compositor y letrista de Broadway, Irving Berlin, escribe una canción que no sólo pasaría a ser de las más reproducidas en la historia de la humanidad, sino también en ese 1942 ganadora del Óscar a la mejor canción: 'White Christmas – Blanca Navidad'.

En 2001 y unas ocho horas después del impacto del primer avión contra las Torres Gemelas el 11S, a eso de las 16.30 hora local de Washington los congresistas estadounidenses que se encontraban en el Capitolio, salieron de forma imprevista a las escalinatas del mismo y empezaron a entonar todos juntos el 'God Bless America' ('Dios bendiga a América').

Lo cantado por los congresistas en aquel instante de puro sentimiento patrio, dolor, rabia y emoción no fue, al contrario de lo que se pudiera pensar, el himno oficial de Estados Unidos (The Star-Spangled Banner, La Bandera llena de Estrellas). Sino la melodía y letra de ese 'God Bless America, creada en 1942 por el mismo autor de White Christmas.

Año 2024, del 1 de enero al reciente 15 de diciembre, los datos señalan que a Canarias han llegado más de 40.000 personas migrantes que se han atrevido a arriesgar sus vidas en la ruta migratoria atlántica, la «ruta canaria», una de las más mortíferas, sino la más, de todo el mundo. Con la valerosa y entregada, a la vez que exhausta, nuestra inigualable El Hierro, como primera anhelada meta volante europea por tantos y tantos migrantes en este año de inminente finalización.

Con un desconocido número de migrantes fallecidos en su travesía en búsqueda de un futuro mejor: imposible saber el dato exacto. Aunque tomado la referencia de la organización Caminando Fronteras relativa a que hasta el pasado mes de junio se estimaban en casi 5.000 las personas fallecidas, puede uno llegar a presuponer cuántas vidas pueden haberse perdido en el camino anhelado de llegar a nuestras islas. Casi 1.000 al mes.

Un año 2024 en que se han cumplido 30 años desde que, el 28 de agosto de 1994, llegara a nuestras islas la primera patera con migrantes a bordo. Dos jóvenes saharauis que fueron capaces de llegar a las costas de Fuerteventura a bordo de una pequeña barquilla pesquera, guiándose como buenamente pudieron gracias a la luz del Faro de la Entallada, al norte de Gran Tarajal, y más cerca –en línea recta, a no más de 100 kms- del puerto de Tarfaya (Marruecos) que de Tenerife.

Barquillas, pateras, cayucos, …términos que especialmente a partir de 2006 empezaron a integrarse en la imparable cotidianeidad de nuestro singular léxico canario, dado el impacto del fenómeno migratorio irregular y desesperado en nuestro archipiélago, que no cesa y al que no termina de atender como corresponde quien singularmente preside España. Que sí, por el contrario, se sigue doblegando a quienes desde la esfera independentista catalana incluso le espetan ya desde la tribuna de oradores que (sic) 'mueva el culo' en aras a concederles todas las prerrogativas imaginadas e imaginables si quiere seguir en el poder.

Un 2024 en que también conmemoramos el 30 aniversario de nuestro villancico, el emblemático villancico de Canarias, obra del maestro y artista Benito Cabrera, 'Una sobre el mismo mar':

«Fuerteventura dunas y arena, aulaga y soledad. Sobre Tindaya trae el viento arcanos desde el mar

Con un conjuro de libertad, amor, futuro y paz.

Por La Gomera silba una estrella al cedro y al brezal. Órganos de basalto cantan nuestra unidad.

Coge el guarapo y ven a brindar en esta Navidad.

Bajo las lavas de Lanzarote duerme un corazón. En su latir cantan mi voz los novios del Mojón.

Iza el Janubio en mares de sal sus velas rumbo al sol.

Apunta el Nublo por Gran Canaria el paso de mi andar por los barrancos donde habita el alma del Faycán. Cuevas pintadas con mazapán pregonan Navidad.

Canta la Palma por sirinoque el son de mi niñez. Por Taburiente arrullo y paz, almendras, flor y miel. Con los enanos se hará verdad la magia que soñé.

Teide y retamas por Tenerife aroman mi cantar. Vuela en Ucanca la esperanza verde del pinar. Un Tajaraste ven a bailar en esta Navidad.

Con las sabinas vive en el Hierro el ansia de mi sed. Dormido en pozos aún está el árbol Garoé.

Busca mi faro y encontrarás la senda del ayer.

Apunta el alba por La Graciosa, mi chinija flor. Por las caletas sueña el jable cielos de arrebol.

Desde Los Roques trae un cantar el viento en su rumor.

Traza tu rumbo por ocho estrellas y se forjarán con el poder de una canción caminos sobre el mar.

Canarias una sola será en esta Navidad.Vamos, cantemos, somos ocho sobre el mismo mar. Siente el latir de un solo pulso, llegó Navidad».

Noche de Paz. Blanca Navidad. Una sobre el mismo Mar. El poder atemporal y la constante colectiva translación a lo largo de la historia de la fuerza infinita de un villancico frente a la barbarie o a la tragedia coyuntural.

El poder de unión de nuestro inigualable villancico, presto a ser interpretado colectivamente en cualquiera de los inigualables y singulares rincones y 'escalinatas' de nuestro archipiélago ante nuestros grandes retos y desafíos. Porque en verdad que somos una sobre el mismo mar.

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Feliz Navidad. También a aquellos que arriesgan su vida por un futuro mejor. Y a todos aquellos que, también en estas fechas, luchan denodadamente por salvarles la vida. Canarias está con ellos.