Podemos salva la ley de justicia de Bolaños a cambio de suspender los desahucios y mantener las ayudas al transporte

Fue un acuerdo in extremis entre los de Ione Belarra y el ministro de Justicia, Presidencia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, el que facilitó el apoyo de los morados. Un pacto para prorrogar el escudo social y que pasa por suspender los desahucios de personas vulnerables sin alternativa habitacional durante un año y mantener las ayudas al transporte durante seis meses.

La medida impulsada por el Ejecutivo, que fue aprobada en la Cámara baja, permitió por un error en los votos de ERC y Bildu que el PNV introdujera una enmienda para agilizar los desahucios en caso de okupación. Es decir, cuando haya habido allanamiento de morada y que según Podemos facilitará los desahucios. Una cuestión que en los últimos días ha provocado un enfrentamiento entre los nacionalistas y Podemos y cuyos efectos colaterales suponían un órdago para el Gobierno.

Hasta pocos minutos antes de la votación, Podemos se mantuvo en la postura que venía defendiendo desde el martes cuando amagó con dejar caer la norma. Una posición que encarnó desde la tribuna la diputada Martina Velarde y confirmó en los pasillos la propia Belarra, incidiendo en el «error» que cometieron EH Bildu y ERC votando a favor. «No lo pueden pagar las personas perjudicadas sino que lo tienen que poder arreglar los grupos parlamentarios», afirmó la secretaria general de la formación.

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El argumento de Podemos es que su pacto con el Gobierno para mejorar la eficiencia de la Justicia y garantizar el acceso de víctimas de violencias sexuales en cumplimiento con la ley del 'solo sí es sí' pasaba por el compromiso de que con sus votos no se legitimaría ningún desahucio. «Esta es una ley que como su nombre indica, lo que hace es organizar la Justicia para que sea más eficaz. No tiene ningún sentido que haya enmiendas en relación a la vivienda y los desahucios», señaló Velarde, reivindicando a Podemos como el partido que «siempre dé la batalla, negocie durante semanas para que se revierta esta situación y quien siempre tiene que resolver los problemas» frente al resto de fuerzas de la izquierda.

A este «error» de EH Bildu y ERC se refirió Jon Iñarritu de Bildu, quien pidió «disculpas» a los ciudadanos. Pero sentó especialmente mal en las filas de ERC. «Errar es humano, remarcarlo aquí no sé si es tan humano», señaló la diputada catalana Pilar Vallugera, notablemente molesta con la postura de Podemos, quien recalcó que «si hay algún grupo que se ha distinguido por la defensa de los desahucios es ERC y también Bildu». «No nos vengan a salvar de nada», lanzó contra los morados.

El PSOE -el ministro Bolaños no intervino en el debate de la iniciativa en el pleno- evitó confrontar con Podemos ni el resto de socios y se limitó a esbozar las tres actitudes en torno a la elaboración de la norma: los siete grupos que «se han remangado» para sacarla adelante, el «vacío parlamentario» de Vox y la del PP, de «un cinismo que raya lo humanamente soportable», en palabras del diputado Francisco Aranda.

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Por su parte, la parlamentaria del PP María Jesús Moro censuró que el Ejecutivo aproveche esta ley para mejorar la eficiencia del a Justicia par introducir enmiendas sobre otros asuntos que no tienen que ver con la misma. «Pierde la Justicia que ha pasado de ser objetivo a excusa de esta ley», subrayó la diputada popular, anticipando su voto en contra a la «letra pequeña inasumible» y criticando que el Gobierno no está preocupado por los ciudadanos sino «maniatado» por sus socios.