La Justicia alemana condena a tres años de cárcel a un exmilitar por espiar para Rusia

La acusación pública subrayó durante el juicio que el soldado profesional se había «ofrecido a Rusia de forma casi penetrante» para dar ventaja a las fuerzas armadas rusas. Al hacerlo, había traicionado información militarmente sensible, criticó el representante del Ministerio Público. El detenido, de 54 años, había actuado como agente de un Estado que «ha demostrado ser un agresor despiadado». Si el militar hubiese revelado, además de información confidencial de servicio, secretos de Estado, podría haber sido condenado incluso a cadena perpetua.

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El abogado defensor del procesado, que se afilió a la ultraderechista Alternativa para Alemania a la vez que comenzó a trabajar como agente para Rusia, señaló en el proceso que en cuatro días su cliente había reducido a escombros todo lo que había construido durante años como soldado profesional concienzudo: «Cuatro días de traición en los que cruzó líneas rojas. Cuatro días de fracaso absoluto», admitió el letrado en su intervención final.

El ya excapitán del ejército germano afirmó en su defensa que había decidido suministrar a Rusia información reservada por miedo a una escalada nuclear del conflicto en Ucrania. «Es la mayor cagada que he cometido en mi vida», dijo en su declaración final. La depresión causada por el exceso crónico de trabajo había mermado su raciocinio, así como el haberse informado sistemáticamente sobre la guerra en Ucrania a través de portales como TikTok y Telegram que difunden sistemáticamente noticias falsas y manipulas.

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Funcionarios de la Oficina Federal de Investigación Criminal (BKA) detuvieron al oficial en Coblenza el pasado 9 de agosto y desde entonces se encontraba recluido en régimen de prisión preventiva. El exoficial del ejército germano, que entre tanto, ha abandonado la formación ultranacionalista, hizo una amplia confesión ante los miembros del tribunal, lo que ayudó a rebajar su pena.