"Roque ya era un líder con 15 años"

Fue protagonista directo en el ascenso a Primera con su gol al Zaragoza para encarrilar el partido decisivo. Y, ya en la Liga de las Estrellas, también abrió el camino en la victoria inaugural del campeonato frente al Sevilla. Titular innegociable, con su renovación oficializada ayer hasta 2020, Roque Mesa no pasa de moda.

Roque es ya un hombre y trabaja para su consagración. Pero hubo un tiempo en el que necesitó de ayuda y confianza para romper el cascarón en su sueño por hacer carrera en el fútbol. Y aquí es ineludible la figura de Juan Vidal, entrenador que le dio la alternativa haciéndole debutar en categoría Prefetente con apenas 15 años. Fue con la UD Telde y en un partido disputado en Fuerteventura frente a La Oliva. Punto de partida de una carrera que, ahora, camina imparable en el mejor escaparate del mundo.

«Roque estaba en la base del club y recuerdo que nada más verlo me impactó. Salvando las diferencias, me recordaba al perfil de Iván de la Peña. Excelente disparo, visión de juego privilegiada, colocación exquisita, buen manejo de la pelota... Decidí apostar por él y ya nunca más bajó con los de su edad. Se quedó con la primera plantilla del Telde, se lo ganó a pulso desde el principio porque ya era un líder. En el vestuario se ganó a todo el mundo con su carácter y simpatía. Y en el campo era todo ambición, empuje, deseos de aprender y mejorar», evoca Vidal. Desde sus orígenes, Roque cogió vuelo como pivote en el centro del campo «con libertad creativa», especifica Vidal, pues pondera la cualidad que tiene «de llegar al área contraria con facilidad bien para armar el remate o asistir a un compañero».

«No me sorprende el gran nivel que está dando en la UD. Siempre he esperado lo mejor de él. Por condiciones, humildad y capacidad de sacrificio, Roque está llamado a ser una figura importante en nuestro equipo y en Primera. Con 26 años el futuro es suyo. Y eso que no lo ha tenido fácil. En algunas fases de su trayectoria tuvo que superar obstáculos importantes y nunca se vino abajo. Dejó su casa muy joven y aceptó cesiones para ganarse la oportunidad que ahora está aprovechando. En este sentido, es un ejemplo para los canteranos», finaliza su mentor.

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