Canarias quiere pescar marisco

Pescar poco, de manera responsable y vender caro un producto de primera calidad. Es la filosofía del negocio que podría relanzar la actividad pesquera canaria hasta límites insospechados.

Quien lo afirma, lo hace con conocimiento de causa. No en vano, José Antonio González, director del proyecto Pescprof, que está coordinado por el ICCM, pero impulsado fundamentalmente por el apoyo europeo de Interreg, ha pasado los últimos cuatro años explorando, estudiando y evaluando los recursos pesqueros y marisqueros de los fondos canarios más profundos.

El proyecto de investigación ha descubierto, realizando exploraciones de hasta 3.000 metros de profundidad, que el Atlántico que rodea a las Islas tiene camarones, cangrejos y merluzas que nada tienen que envidiar a los manjares del norte o sur de la Península.

El siguiente paso es lograr colocar en las mesas canarias e internacionales exquisitos productos como el cangrejo rey, el camarón soldado o el cabezudo, poniendo en marcha una flota pesquera moderna, pero artesanal. «Sólo harían falta seis barcos por isla, unas nasas especiales desarrolladas por el proyecto de investigación y, sobre todo, la implicación de la Administración pesquera regional».

Es la opinión de José Antonio González, director del Pescprof. La de las cofradías de pescadores de la Isla, que también colaboran en la investigación, que proseguirá en el 2007, es algo más desconfiada. «Lo primero es adaptar la normativa», explica Juan José Martín, de la cofradía de Taliarte, «que permite menos nasas que en la península»

. «Es un buen negocio, pero hay que asegurar la rentabilidad», apunta Rubén Déniz, patrón de la cofradía de Mogán. En lo que todos coinciden es en la calidad del producto canario. «¡Donde esté el camarón canario, que se quite el de Huelva!», exclaman convencidos los pescadores.

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