Los precios de los alimentos se moderan al 4,4%, pero el aceite sigue disparado

En cambio, la tasa de inflación general repuntó en mayo al 3,6%, tres décimas más que en abril, según los datos publicados este jueves por el INE. Por su lado, la inflación subyacente subió ligeramente de nuevo en mayo hasta el 3%. Esta es la tasa que permite analizar el comportamiento de los precios en la cesta de la compra de productos y servicios diarios, al excluir los costes energéticos y alimentos no elaborados, que son los más volátiles. Tocó su máximo en febrero de 2023 (7,6%) pero desde entonces se ha ido reduciendo paulatinamente hasta el 2,9% que llegó en abril, la tasa más baja en dos años, para repuntar ahora al 3%.

Y la inflación de los alimentos sube sobre todo por el incremento del precio del pescado, las legumbres, la carne y, sobre todo, el aceite de oliva. En mayo se situó un 63% por encima de su precio de hace un año, aunque hay que destacar que en variación mensual baja un 2% por primera vez en mucho tiempo. Y es que este producto básico de la dieta mediterránea acumula un repunte del 200%, lo que significa que su precio se ha triplicado desde enero de 2021.

De hecho, en el Banco de España explican que el aceite es una de las razones detrás de que la inflación de los alimentos siga siendo más alta en España que en la media de la eurozona. El supervisor detalló en su informe trimestral que la composición de la cesta de la compra es la que marca esta diferencia, ya que en España se están consumiendo más los productos que más han subido de precio, como es el caso del aceite de oliva, mucho más consumido en nuestro país que en otros. Por tanto, no es que los precios de los alimentos en general sean más altos, sino que los españoles compramos más volumen de los más caros.

Queda por ver cómo evolucionará la tasa de inflación los siguientes meses ya que, en caso de que el Gobierno no prorrogue la medida como dejó caer este miércoles el presidente Sánchez, la rebaja del IVA de los alimentos básicos decaerá el próximo 30 de junio. Los cálculos del Banco de España anuncian una subida del IPC de julio de entre 2 y 3 décimas, y una décima al alza el promedio de 2024, hasta cerrar el año con una tasa de IPC del 3%.

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Pero ayer el presidente anunció que llevará al Congreso la prórroga de esta medida que se puso en marcha el 1 de enero de 2023 para paliar el impacto de la crisis inflacionista en las familias. Ángel Gavilán, director de Estadística del Banco de España, reiteró el pasado martes durante la presentación del informe trimestral del organismo que esta medida debería haber sido «más focalizada», ayudando de forma directa a los colectivos más vulnerables, lo que además hubiera conllevado un coste presupuestario «mucho menor».