

Secciones
Servicios
Destacamos
El presidente de EE UU, Donald Trump, ha encontrado un enemigo inesperado en su constante presión para que la Reserva Federal (Fed) vuelva a pensar ... en bajar los tipos de interés para estimular la economía. No se trata ni de la inteligencia artificial china, ni de los productos que pretende gravar con aranceles. El rival a batir está en casa y es un alimento básico en la cesta de la compra: los huevos.
Aunque pueda parecer irónico, la realidad es que este producto tuvo la culpa de dos tercios del alza total que en enero registró la cesta de la compra en el país (+0,4%). En concreto, la docena de huevos -como mide el Departamento de Trabajo este producto para sus estadísticas- se disparó un 15,2% en el primer mes del año, su mayor incremento desde junio de 2015.
El encarecimiento interanual se eleva ya al 53% y la caja de doce unidades de Categoría A ronda los 5 dólares de media, aunque hay establecimientos en los que el precio es muy superior, por encima incluso de los 8 dólares. Cifras nunca vistas y que solo se llegaron a rozar durante la pandemia, en plena crisis de suministro global.
Detrás del repunte actual -junto a la propia evolución al alza de la inflación, que subió al 3% en enero- están los focos de gripe aviar que en los últimos meses han llevado al sacrificio de millones de gallinas ponedoras en el país. Una crisis que, en todo caso, no parece tan grave como la vivida en 2015 por motivos similares, que obligó a EE UU a acelerar las importaciones de este producto.
No obstante, la preocupación en el mercado es notable y el país se ha visto inmerso en una ola de situaciones inéditas como la que presentan algunas cadenas de restauración, que han comenzado a cobrar un suplemento por cualquier producto de la carta que lleve huevo entre sus ingredientes. En los supermercados, el desabastecimiento empieza a ser una realidad. Y muchas cadenas están limitando ya la compra a una docena de huevos por cabeza, según confirma a este medio un ciudadano español con residencia en Washington. Es el caso de la popular cadena Trader Joe's, que está aplicando este tipo de medidas, «aunque algunas tiendas son más estrictas que otras», apunta. La prensa local también se hace eco de negocios nunca vistos como el del alquiler de gallinas en las granjas.
Al margen de las imaginativas opciones para esquivar la escasez, el encarecimiento del huevo y de otros alimentos amenaza con tensar aún más la ya de por sí rígida relación entre Trump y el presidente de la Fed, Jerome Powell. Aunque la independencia del organismo no se pone en duda, el nuevo inquilino de la Casa Blanca aboga por una rebaja de tipos con un discurso que, en ocasiones, ha tomado tintes de amenaza, sobre todo después de que la Fed decidiese en enero pausar su ciclo de recortes.
Noticia relacionada
El mercado ha valorado que no quedaba otra opción. «Las políticas de Trump ponen a la Fed en una situación difícil; la inflación plantea interrogantes sobre su capacidad para acometer finalmente los dos recortes de tipos de 25 puntos básicos que esperaba en sus proyecciones de septiembre», apuntan los analistas de Pimco en un reciente análisis. El consenso, de hecho, apunta ahora a una sola bajada de tipos de aquí a final de año. Y hay voces que anticipan incluso alguna subida. «Los progresos en el control de la inflación se han estancado y las perspectivas a medio plazo repuntan anticipando el impacto de la agenda económica de Trump con los aranceles, las restricciones a la importación, la desregulación, el recorte de impuestos, etc.», señala Aranzazu Bueno, analista de Bankinter.
Esto, sumado a un mercado laboral fuerte, es el argumento de Powell para mantener los tipos como están. «No esperamos nuevos ajustes hasta, al menos, septiembre», añade Bueno. El propio Powell ya advirtió esta semana ante el Senado que «no tiene ningún tipo de prisa» por bajar las tasas de referencia. Solo unas horas después, Trump volvía a dejar clara su postura: «Las tasas deben bajar e ir de la mano de los próximos aranceles», afirmó a través de la red social X.
¿Ya estás registrado/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.