Entrevista a Íñigo Sagardoy. Presidente de Sagardoy Abogados

«En Canarias habrá más dificultades para recortar jornada por el peso del turismo»

El presidente de Sagardoy Abogados participa hoy en la capital grancanaria en el acto de presentación del informe sobre el mercado laboral: 'Human Capital Outlook', que ha realizado el Instituto EY-Sagardoy. El acto coincide con los 20 años de la firma Sagardoy en Canarias.

– La reducción de la jornada laboral tiene visos de que se va a aplicar aunque sea sin el acuerdo de los empresarios, ¿qué consecuencias para la empresa?

– Este es uno de los grandes temas que existe en la actualidad en el mundo laboral, y de ahí que sea muy importante ser cautos en la hora de su implementación. No es fácil aplicar un modelo generalizado, unilateralmente decidido por la ley, porque la variedad empresarial en nuestro país es enorme. Y además, existen sectores, muy importantes como el turismo para Canarias, cuya aplicación puede ocasionar dificultades a pequeñas y medianas empresas. A mi modo de ver, la vía más apropiada para abordar esta cuestión es un acuerdo entre los interlocutores sociales, con objetivos claros de futuro, basado en tres pilares: flexibilidad, transición larga hacia el nuevo modelo, y contemplar situaciones especiales en determinados sectores. Ello sólo se puede hacer por la vía de la negociación colectiva sectorial y/o empresarial.

– Imagino que son sobre todo las micropymes y autónomos con trabajadores los que más lo van a sufrir, ¿de qué manera?

– Como señalaba anteriormente, la flexibilidad para adaptarse de una pyme no es la misma que la de una gran empresa. Esto es evidente. Lo que preocupa es que la implementación de esta medida suponga mayores costes empresariales por nuevas contrataciones o un sobresfuerzo de la plantilla existente para cubrir las horas vacantes. En todo caso, de llevarse a cabo, debería dejarse un período transitorio largo de entrada en vigor para adaptarse a la nueva realidad y, sobre todo, espacio a la negociación colectiva.

– ¿Cuál será el resultado? Peor servicio en las empresas, cierre de días a la semana de apertura, recorte de horas de apertura al público?

– Dependerá de cada empresa o sector. La jornada de trabajo es, lógicamente, un tema capital en el desarrollo de las relaciones laborales y cada aspecto que se modifique tiene un impacto directo en los días de descanso, vacaciones, horas extras… Por ello, cada empresa tendrá que decidir qué enfoque le va a dar a la jornada anual de sus trabajadores por la reducción legalmente impuesta. Habrá muchas que den más días de vacaciones, otras más horario. Dependerá mucho de cada negocio o sector.

– En los últimos años y con Yolanda Díaz como ministra se han vivido avances sustanciales en las condiciones laborales de este país, como la imposición del contrato indefinido y el SMI. ¿Tuvo finalmente alguna consecuencia sobre las empresas? Y sobre los trabajadores? porque se apuntaba que perjudicaría a los menos formados en beneficio de los más cualificados.

– Según un informe elaborado por BBVA Research, que ha analizado esta cuestión, los aumentos del salario mínimo interprofesional (SMI) son una excelente noticia en economías en las que crece la productividad y las tasas de empleo son elevadas. Sin embargo, hay que ser conscientes de los costes y beneficios de la medida. En muchas provincias y sectores, el salario mínimo excede ya el 60% del salario mediano bruto. La evidencia apunta a que en las regiones donde el salario mínimo es mayor en relación con el salario medio, la tasa de desempleo también es más elevada, si bien es cierto que el beneficio económico es positivo porque los trabajadores tienen un mayor poder adquisitivo. Por tanto, bienvenida la subida del SMI, pero evitar un descontrol en los incrementos muy fuertes.

– El control de la jornada fue otra medida que se implementó con cierta polémica y que tampoco ha tenido mayores consecuencias. Las quejas sindicales son que el control es relativo. ¿Se abusa de la jornada en España con contratos parciales que se alargan por igual sueldo?

– En una economía como la española dónde el sector servicios tiene un peso muy importante, es complejo el control horario, porque la flexibilidad es connatural a la propia prestación del servicio. En todo caso, todas las economías desarrolladas tienen sistemas de control horario que debieran complementarse con flexibilidad de horas, y lo que es más importante, con una eficaz desconexión digital fuera de la jornada de trabajo.

– Los sindicatos dicen que la productividad y el absentismo, dos de los grandes problemas de la economía y la competitividad para España, se solucionarán con el recorte de la jornada. ¿Será así?

– Totalmente de acuerdo en que la productividad y el absentismo, junto con otros problemas, son dos de los grandes déficits del mercado de trabajo español. Pero no creo que la mejora de la productividad se pueda solucionar con la reducción de la jornada. Influyen otros muchos factores. Junto a ello, la prioridad número uno de cualquier Gobierno debería ser la mejora de las políticas activas de empleo y la formación. Hablamos mucho de reformas laborales, de la normativa laboral, pero existe un camino enorme para optimizar la colocación de trabajadores desempleados, recualificar a los desempleados (y los empleados) y establecer incentivos para cubrir las vacantes que en estos momentos tiene el mercado laboral español.

– La confrontación entre empresarios y sindicatos parece hoy mayor que nunca, además va acompañada de una tensión creciente con el Gobierno y la ministra de Trabajo.

– No considero que hoy en día tengamos una mayor conflictividad entre empresas y sindicatos. Ni mucho menos. En un sistema democrático, moderno, de nuestras relaciones laborales (como el actual), el conflicto es propio del sistema, pero de menor calado que cuando iniciábamos el camino de la democracia con frecuentes tensiones sociales, huelgas y luchas muy potentes. Creo que el dialogo social es uno de los grandes valores de nuestra democracia y estos años se ha demostrado que funciona, que se llegan a acuerdos y que se consiguen avances sociales importantes gracias a ello. Como suele pasar se resalta más lo negativo que lo positivo. Pensemos en que recientemente se han firmado tres grandes acuerdos, el de la reforma laboral de 2021, el de la negociación colectiva del 2023 y el de pensiones del 2024. Respecto a los empresarios, a veces pienso que es mito esa visión pesimista. En una encuesta reciente de valoración de los empresarios, el 77% de los españoles tenía una imagen positiva de los empresarios en nuestro país. Estamos en un país de mucha pyme y autónomo, empresarios en definitiva, que crean empleo y que invierten sus ganancias para hacer crecer sus negocios. Eso siempre debe ser bienvenido en cualquier país.

– Las organizaciones sindicales apuntan siempre a Canarias como la región con un mercado laboral en el que hay más abusos a la hora de las jornadas parciales, se hacen mas horas fuera de horario y sin control, se pagan los salarios más bajos... ¿Tiene esto alguna solución? Ustedes que cumplen 20 años en Canarias, ¿cómo ven la evolución del mercado laboral de las islas?

– El mercado laboral en las Islas Canarias ha experimentado cambios muy significativos en los últimos veinte años. Si bien a principios de los años 2000 se caracterizaba por una fuerte dependencia de los sectores del turismo y la construcción, en los últimos años ha comenzado una evidente transformación que ha culminado con unos datos realmente buenos en la cifra de desempleo correspondientes al pasado mes de septiembre. Uno de los retos más importantes para el mercado laboral de la región sigue siendo la necesidad de diversificación económica, para lo que se han promovido el crecimiento de sectores como la tecnología, las energías renovables y la economía vinculada al mar y a sus recursos, con el objetivo de crear empleos más estables y de mayor calidad. Además, se ha efectuado un esfuerzo en la mejora de la formación y la cualificación de los trabajadores, en especial en áreas como las competencias digitales, para fomentar la competitividad de las Islas y permitir la movilidad de los trabajadores hacia otros empleos. Actualmente, las características estructurales del mercado laboral canario presentan importantes desafíos, como la alta temporalidad, la elevada tasa de paro juvenil, la brecha de género en el empleo y unos salarios por debajo de la media nacional. El futuro del mercado laboral en Canarias dependerá de su capacidad para continuar diversificando su economía, mejorando la cualificación de sus trabajadores, adaptándose a los cambios tecnológicos e impulsando el desarrollo de nuevos sectores económicos en las Islas que supongan una cada vez menor dependencia del sector turístico.

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