Polémica con los sueldos en la hostelería

De los 204 hoteles de Tenerife, solo los 80 de cadenas nacionales tienen pactos salariales

De los 204 hoteles que se contabilizan en la isla de Tenerife, están sujetos a los pactos salariales un total de 80, que son precisamente los que están gestionados por cadenas hoteleras nacionales. Estos pactos salariales les obligan a abonar salarios más elevados de los que recoge el convenio de la hostelería de Santa Cruz de Tenerife mientras que el resto de los establecimientos, en manos de grupos canarios, están al margen.

De media, los trabajadores de hoteles de cadenas nacionales -Riu, Barceló, Iberostar o H10, entre otros- abonan en Tenerife de media sueldos de 27.000 euros mientras que en el resto de complejos y sin pacto salarial los sueldos medios rondan poco más de 22.000 euros. En la provincia de Las Palmas, con un convenio para todos por igual, según puesto y escala, la media del sector es de 25.000 euros y es uno de los mejores en el sector de la hostelería de España.

La pretensión de la cadenas nacionales de ir a un convenio regional -que no comparte la cúpula de Ashotel, que dirige Jorge Marichal- que acabe con estas diferencias salariales y que equipare condiciones entre empresas y trabajadores es una de las razones por las que han decidido constituir su propia asociación al margen de Ashotel. «Son los grandes grupos los que están pagando los pactos salariales de Tenerife», indican fuentes sindicales.

Según datos a los que ha tenido acceso CANARIAS7, tomando por ejemplo la categoría de recepción, el brutal anual en un hotel de Tenerife de cuatro y cinco estrellas, con 48 días de vacaciones, la persona cobra 23.290, 92 euros (esto el convenio puro y duro, sin aplicar los pactos salariales). Esa persona en el mismo establecimiento en Las Palmas percibe 25.816 euros, lo que supone 2.525 euros más que el de Tenerife.

Si vamos a los hoteles de cadenas nacionales con pactos salariales, el sueldo crece muy por encima. Por ejemplo, en el Royal Hideaway Corales, que es cinco estrellas, ese recepcionista cobra casi 35.000 euros, lo que supone 9.118 euros más que en Las Palmas, que es de los mejores del país. En el caso del Hard Rock, el sueldo es de 33.153,67 euros, lo que supone 7.337 euros más. Y así, con todos ellos.

El secretario general de Sindicalistas de Base de Canarias -primera fuerza sindical en la hostelería de Tenerife-, Manuel Fitas, asegura que lo único que persiguen las cadenas hoteleras nacionales «es cargarse los pactos salariales» y equiparar los sueldos que abonan a los de la provincia de Las Palmas. «Incluso pueden plantear algo por encima pero no quieren seguir pagando los sueldos actuales que son más altos de los que se paga en Madrid, Barcelona, Baleares o cualquier otra ciudad; porque digan lo que digan el mejor convenio de la hostelería está en Tenerife», indica.

Fitas, que conoce bien la intención de las grandes cadenas nacionales con una asociación, afirma que «no quieren darse de baja de Ashotel» pero sí tener más peso en las decisiones que se toman en el sector. «Un camarero en Tenerife puede cobrar 2.400 euros en 14 pagas. Eso quieren llevarlo a la baja», indica. Fitas se muestra a favor de un convenio regional de la hostelería pero apunta que será difícil alcanzarlo porque no se puede retocar a la baja lo que ya cobran esos trabajadores con pactos salariales.

El vicesecretario general de UGT Canarias y responsable de Acción Sindical, Paco González, teme lo que puede suponer un convenio regional para los trabajadores que cobran a través de los pactos salariales. «¿Pretenden acaso igualar salarios a la baja? Porque eso no lo vamos a consentir», indica.

Los representantes de las grandes cadenas ya trabajan en la constitución de esta asociación, que surge en la provincia de Santa Cruz de Tenerife por desavenencias con Ashotel aunque, según fuentes próximas, podría extenderse al resto de las islas. «De la misma forma que se extendió a Gran Canaria el malestar por los problemas que genera el turismo en Tenerife con el 20 A, ahora nos puede salpicar el malestar de las grandes cadenas con Ashotel», indican fuentes próximas.

Las grandes cadenas aseguran que su intención «no es suplantar a nadie».