La UD evoca al espíritu del ascenso del 27 de mayo

Sábado 27 de mayo de 2023. Gran Canaria despierta tan nerviosa como ilusionada. Está a noventa minutos de tocar el cielo, de volver a codearse con los gigantes del fútbol español, de tratar de regatear a muros y frenar a estrellas. A la UD Las Palmas le vale un empate en sus dominios contra el Alavés para lograr el ascenso y volver a Primera División. Sus aficionados lo saben y organizan una quedada en el viejo Insular -ahora un parque- para subir juntos andando y llenando el aire de pasión hasta Siete Palmas. Va llegando la hora de la batalla, la expedición baja por Fondos de Segura en guagua y ahí, donde se forja un vínculo especial, esperan miles y miles de hinchas -algunos sin entrada- para dar fuerza a los suyos.

Los siguientes noventa minutos son historia. La UD, siempre segura, selló ese empate (0-0) que la devolvía a la máxima categoría del fútbol español. La gloria y las estrellas fueron amarillas. Un punto de oro que daba el billete del ascenso a los isleños y que mandaba al Alavés a jugar los playoffs en los que luego, con mucho mérito también, subiría también a la élite.

Ahora, y nuevamente como rivales por un mismo destino, la salvación, Las Palmas y Alavés levantarán espadas para medirse en un duelo con cierta dosis de agonía, pues ambos conjuntos no pasan por su mejor momento deportivo. Pero en la UD se agarran a ese espíritu, escoltado siempre por sus aficionados, que llevó en volandas al conjunto insular a Primera. Al gen competitivo de las grandes citas, cuando el sufrimiento aflora.

El partido de este viernes, a partir de las 20.00 horas, es una final. Tanto el cuerpo técnico como la plantilla lo tienen claro. Es más, el propio Diego Martínez, que se la juega también, ya avisó al término de la derrota en el Benito Villamarín contra el Betis (1-0). «Es un partido de más de tres puntos porque es un rival directo. Toda la isla tenemos que estar ahí», indicó el preparador gallego, dejando clara la importancia capital del partido ante el combinado vitoriano.

Un triunfo sacaría -al menos de forma momentánea- a Las Palmas de los puestos de descenso. Ahora mismo es penúltimo en la tabla clasificatoria el equipo amarillo, con 24 puntos. Por encima tiene al propio Alavés (25), Leganés (27), Valencia (27) y Espanyol (28). Así pues, ganar supondría una bombona de oxígeno y fe, a la par que trasladaría toda la presión a los rivales en la contienda por la permanencia.

Al Alavés lo superaría la UD dejando la victoria en casa. Pero también al Valencia, que el sábado visita Montilivi en un complejo choque frente al Girona (20.00 horas). El Leganés recibe al Betis el domingo a las 13.00 horas en Butarque. El Espanyol solo podría caer esta jornada en el pozo si sucumbe en su salida a Mallorca (sábado, 15.15 horas), el Alavés asalta el Gran Canaria y ganan también Valencia y Leganés en sus respectivos enfrentamientos.

Dentro de la caseta amarilla, y a pesar de no haber ganado un solo partido en todo lo que va de 2025, logrando solo dos puntos de los 27 disputados, hay confianza plena. «Se va a sacar esto adelante, lo tenemos claro. Contra el Alavés daremos el primer paso hacia la permanencia», aseguran fuentes del club consultadas por este periódico. «Con la afición será más fácil y van a empujarnos contra el Alavés», añaden.

La Unión Deportiva, abonada al sufrimiento, tratará de hacerse fuerte en su hogar, de donde ya se han escapado demasiados puntos en lo que va de competición doméstica. Ahora, con la soga apretando el cuello, es donde tiene que dar un paso al frente la escuadra isleña, demostrando que quiere continuar en la máxima categoría del fútbol español un curso más.

Las Palmas, en el Gran Canaria, ha logrado tan solo tres triunfos, cediendo cuatro empates y empobreciendo sus números con seis derrotas. La salvación va a pasar por hacerse fuerte en la isla, donde los de Diego Martínez recibirán, de aquí a final del curso, al Alavés, Real Sociedad, Atlético de Madrid, Valencia, Rayo Vallecano y Leganés. Casi nada.

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