No encajar gol fuera de casa es la gran asignatura pendiente para Vallecas

En el propósito de la UD de asaltar Vallecas el próximo viernes y en busca de un triunfo (o empate) que puede sacarle de los puestos de descenso emerge un factor esencial que, en el presente curso, sigue siendo asignatura pendiente: la portería a cero fuera del Gran Canaria. Diego Martínez considera que las opciones de triunfo de su equipo deben cimentarse desde la seguridad atrás, algo que se dio en la victoria ante el Girona, único encuentro de la campaña en curso en el que no se han encajado goles (1-0).

Y el técnico gallego trabaja en potenciar la fortaleza atrás y más en un campo en el que por sus dimensiones (100x67 por los 105x68 del Gran Canaria) el juego en las áreas se multiplica, lo que redobla los peligros. Controlar las segundas jugadas y poner escudo en los centros laterales asoman como premisas más necesarias que nunca frente a un adversario que domina como pocos el alboroto que se genera en las zonas sensibles cada vez que actúa con la piel de local.

Lo cierto es que la tendencia de la UD como visitante está resultando del todo deficitaria en el apartado defensivo, pues en seis salidas ha encajado 13 goles, con un promedio ligeramente superior a dos tantos por encuentro, balance que solo empeora un Valladolid que ha recibido 18 dianas en el mismo número de presencias foráneas. Ahí tienen tarea Martínez y sus hombres y se han fijado lo que viene ahora para comenzar a restituir respeto y contundencia en el área propia. Frente al Atlético dos balones filtrados arruinaron la resistencia expuesta. Y dicen que ha quedado el escarmiento.

Porque viene de atrás la fragilidad en esa faceta, ya que en el curso pasado también se detectó una peligrosa dinámica a dar cortesías a los anfitriones en forma de goles: solo en tres partidos lejos de casa se dejó el marco a cero, siendo curiosamente uno de los mismos el disputado en el feudo del Rayo Vallecano, resuelto con un 0-2 por aciertos de Moleiro y Javi Muñoz.

Sea o no un guiño del destino, ahora toca repetir actuación con especial hincapié en acorazar los dominios de Cillessen. Porque a partir de ese objetivo se allanará considerablemente el plan para ganar.

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