La joya reluce en Barranco Seco

Ignacio S. Acedo

Martes, 9 de julio 2019, 08:09

IGNACIO S. ACEDO LAS PALMAS DE GRAN CANARIA

En un día para la historia, que quedará inmortalizado en las hemerotecas por su trascendencia e impacto, la UD Las Palmas inauguró ayer su flamante Ciudad Deportiva en Barranco Seco con todas las pompas y honores que merecería la ocasión. No se recuerda convocatoria igual en los setenta años de vida de la entidad por el salto cualitativo sin precedentes que supone y que instala, de una vez, al club en la modernidad. Tres campos, unas extensas dependencias equipadas a la vanguardia, con todo tipo de comodidades para los profesionales, accesos y amplios aparcamientos, todo integrado en un complejo en el que se han respetado los parámetros medioambientales y de conservación paisajística. Así reluce la joya que ya forma parte de la vida diaria de la entidad y que, en adelante, disfrutarán todas las generaciones de futbolistas y canteranos que defiendan el escudo. Tras años de proyectos, y cuatro décadas después de el histórico dirigente Manuel Betancor ejerciera de visionario en la compra de estos terrenos periféricos para la expansión logística de la UD, el 8 de julio de 2019 comenzó la cronología moderna para felicitación unánime y elogio compartido.

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Miguel Ángel Ramírez, presidente bajo cuyo mandato se han desarrollado en su integridad las obras, recibió con un saludo personalizado a todos los invitados al bautizo de la Ciudad Deportiva, en el que también se personó la plantilla y cuerpo técnico de la UD. David García, leyenda viva de esta camiseta y que da nombre a uno de los campos, tampoco faltó, sonriente y orgulloso de ser protagonista pese a que todavía espera la resolución de su incertidumbre contractual para poder seguir en la plantilla. Fue una mañana soleada con parlamentos todos impresionados a la vista de la imponente superficie y que integra el valor patrimonial más preciado. «Nunca el club pudo tener esta Ciudad Deportiva por falta de liquidez. Y ahora que hemos podido tener la solvencia económica necesaria, no queríamos el dinero en el banco, ni tampoco gastarlo en jugadores. Nada mejor que invertirlo en lo que llevábamos esperando toda la vida y que pone al servicio de nuestra cantera un lugar inigualable para desarrollar su trabajo y su talento», afirmó con satisfacción Ramírez en su turno de palabra y antes de guiar la visita por las interioridades del gran tesoro.