Si hay algo que Luis Carrión tiene claro es su filosofía y manera de jugar al fútbol. Ya adelantó cómo piensa hacerlo. El técnico expuso su ideología, durante la rueda de prensa de bienvenida, aseverando que: «Hay una premisa básica: el equipo que es capaz de tener balón y defender alto tiene muchas más posibilidades de ganar. Hay días en los que se usarán dos extremos por dentro que te ganan partidos, y en otros, por fuera».
Pues dicho y hecho. El entrenador ya exige a sus pupilos ser el protagonista con el balón bajo el sofocante calor de Marbella. Además, se encuentra realizando algunos tests para concretar, junto a la dirección deportiva, qué jugadores son susceptibles de abandonar el club y aquellos otros que deben explotar sus cualidades con la elástica amarilla.
El cuerpo técnico de la UD Las Palmas es prácticamente nuevo. El preparador físico, Javier Póveda, está dando caña a los jugadores a un mes vista del comienzo de la competición, con el fin de potenciar lo bueno que ya se ha creado. Todo ello, para tratar de concienciarse con los principios de Luis Carrión: tener el balón, ser agresivos, ambiciosos y querer ganar siempre y a todos y cada uno de los rivales.
Del mismo modo, el míster ya subrayó que llegaba para mejorar lo que ya había en el club: «Vengo a un equipo que ya funcionaba». Sí que muestra seriedad y sabiduría en aras de ir desgranando las piezas que conformarán su once ideal, pues prefiere tener una plantilla de 24 futbolistas.
En estos primeros días en tierras malacitanas, con mucha toma de contacto con balón, el barcelonés asegura que los chicos tienen «mucha calidad y complicidad» con el esférico, pero «hay que darle forma» para poder tomar decisiones cruciales antes del pistoletazo de salida en la competición doméstica.
Partiendo del bloque duro de la temporada pasada (2023-24), en lo que a la sala de máquinas se refiere, se encuentra el buque insignia del equipo; Kirian Rodríguez. El tinerfeño será su extensión en el terreno de juego, como ya sucedió con García Pimienta, si bien existen miles de combinaciones para el resto de piezas.
En la parcela ofensiva, habrá que exigir goles a Sandro Ramírez, quien prometió el pasado curso que se vería su mejor versión pero el curso no fue como esperaba. Jaime Mata, delantero experimentado que puede aportar goles, intentará desplegar su buen juego y dar asistencias a sus nuevos compañeros como Marc Cardona o Iván Cedric, en espera de los descartes o cesiones.
Bajo los tres palos, el exculé Jasper Cillesen se postula como favorito para llevarse el gato al agua y ser el elegido por el míster para defender la portería amarilla. No obstante, Dinko Horkas viene pisando fuerte y quiere «adaptarse cuanto antes al equipo». Caso aparte es el tan traído Álvaro Valles, que nadie sabe cómo terminará, pero todo indica que lejos de Gran Canaria.
Según palabras del presidente de la entidad, Miguel Ángel Ramírez, aún falta por desembarcar en la isla al menos otro central en la retaguardia, dada la lucrativa salida de Saúl Coco, por lo que es de preveer que quien aterrice se dispute con Alex Suárez y Juanma Herzog la plaza junto a Mika Mármol en el eje de la zaga.
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