Brussino intenta superar a Sastre.acb Photo / Emilio Cobos
La vida sigue igual en el derbi: Huertas aniquila al Dreamland Gran Canaria (84-74)
Liga Endesa ·
El La Laguna Tenerife empequeñeció al combinado claretiano una temporada más en el Santiago Martín | El cuadro de Jaka Lakovic adoleció de continuidad y contundencia para ofrecer resistencia y estar a la altura
Un derbi no es un partido más. El Dreamland Gran Canaria se acostumbra a sucumbir y eso merma la moral con el paso de las temporadas cuando llega una cita subrayada en el calendario por propios y extraños. Este domingo, en el Santiago Martín, donde es incapaz de ganar desde el curso 2018-2019, el combinado claretiano mordió el polvo de nuevo en un choque dominado de principio a fin por el La Laguna Tenerife (84-74).
El Dreamland Gran Canaria, que salió con Andrew Albicy, Joe Thomasson, Nicolás Brussino, John Shurna y Mike Tobey en el quinteto inicial, buscaba ofrecer su versión más coral y sólida en ambos lados de la pista en el exigente Santiago Martín, pero no encontraba soluciones para castigar a un La Laguna Tenerife crecido ante sus incondicionales.
Los triples de Doornekamp, Kramer y Scrubb y los fundamentos en la pintura del grancanario Fran Guerra -cinco puntos, dos rebotes y dos asistencias- otorgaban el dominio del encuentro a la escuadra de Txus Vidorreta tras un parcial de 14-1 (14-3, min. 3).
El cuadro de Jaka Lakovic, sin ideas ni intensidad, se veía superado en los duelos individuales en una puesta en escena nefasta. El preparador esloveno movía las piezas para conectar a su equipo, pero el conjunto aurinegro se mostraba superior en todas las facetas del juego, controlando el ritmo, circulando el balón a una velocidad de vértigo, acertando desde el exterior y dando un nuevo recital en el bloqueo directo.
No había manera. El Dreamland Gran Canaria volvía a arrugarse en un derbi canario. Brussino y Homesley apretaban el electrónico y marcaban el camino para dar algo de guerra (14-7, min. 6).
Sin embargo, los errores defensivos lastraban en un pulso que subía los decibelios. Alocén trataba de dar más ritmo al juego amarillo, pero el primer cuarto tenía color aurinegro una temporada más merced a su acierto exterior (20-12).
Guerra empequeñece a Conditt IV
El guion no varió en el arranque del segundo periodo. Lakovic no daba con la tecla y el La Laguna Tenerife proseguía más enchufado y consciente de la trascendencia de una batalla de máxima rivalidad regional.
El combinado local empequeñecía al Dreamland Gran Canaria como el jugador de Pedro Hidalgo -siete puntos- comentaba a un Conditt IV incapaz de pararlo. El entrenador balcánico sentaba al pívot internacional puertorriqueño, pero Tobey no aportaba lo suficiente y la renta tinerfeña crecía de lo lindo (26-12).
Tocaba ponerse el mono de trabajo para no volver a morder el polvo en el Santiago Martín. El Dreamland Gran Canaria apretó los dientes y exhibió músculo para carburar e ilusionar a los 150 aficionados desplazados a Tenerife, tras un parcial de 0-8 (28-25). Eran los mejores minutos de un Granca que aguantó el golpe y su inicio desalentador -12 puntos en los primeros 12 minutos- para mejorar y crecer durante el transcurso del envite.
Guerra anota ante Tobey.
Emilio Cobos
Pero Marcelinho Huertas irrumpió para frenar el arreón de su rival, dirigiendo, facturando y aprovechando una falta antideportiva señalada a Homesley (37-28, min. 18). El La Laguna Tenerife devolvía el parcial y recuperaba la confianza -13 asistencias y ninguna pérdida- y la tranquilidad en el marcador al descanso (39-32).
Lo cierto es que la losa podía ser peor para un Dreamland Gran Canaria sin regularidad ni acierto exterior -cinco de 16 en triples- al término de los primeros 20 minutos.
Un Granca más reconocible
Tras el paso por los vestuarios, los triples de Pelos y Albicy impulsaron a un Dreamland Gran Canaria más reconocible. Con las ideas más claras, con carácter y con acierto exterior, llegaba el momento amarillo en el derbi canario (46-43, min. 33).
El La Laguna Tenerife adolecía del acierto exterior de la primera parte y Homesley -11 puntos y tres rebotes- asumía galones para agigantar las opciones de victoria del Granca. El francotirador norteamericano, que se midió al equipo aurinegro en la pasada edición de la 'Champions' FIBA, lucía sus recursos para ser determinante (53-51).
Fue un espejismo porque el La Laguna Tenerife apretó en defensa de nuevo en el tramo final del tercer cuarto y aceleró para conservar la renta a falta de los últimos diez minutos (61-55).
La ley de Marcelinho Huertas
Restaba un acto para tener más continuidad en el juego y revertir la dinámica en los pulsos de rivalidad, aunque el conjunto local proseguía imponiendo su ley merced a un Marcelinho Huertas estelar -15 puntos y ocho asistencias- (69-59, min. 34).
Albicy lanza desde el exterior.
Emilio Cobos
Thomasson oxigenaba al Dreamland Gran Canaria desde el exterior cuando se agotaba una posesión que podía haber sido demoledora para los intereses claretianos (69-62), pero Huertas y Guerra metieron la directa para prácticamente decantar una nueva victoria en el derbi, obligando a Lakovic a solicitar tiempo muerto para no bajar los brazos ya (73-62).
Tobey -11 puntos y siete rebotes- lideraba un último esfuerzo en un Granca que no estuvo a la altura, pero el magisterio de Huertas propició que la vida siga igual por estos lares (77-64).
Pelos convirtió desde el exterior con poco menos de tres minutos por jugar (77-68), pero la sempiterna conexión Huertas-Shermadini finiquitó un duelo que tuvo color aurinegro de principio a fin (84-74). El Santiago Martín vivió y disfrutó de una gran fiesta y el Dreamland Gran Canaria destapó sus vergüenzas un curso más en el derbi.
Ficha técnica:
84. La Laguna Tenerife (20+19+22+23): Fitipaldo (7), Kramer (8), Scrubb (5), Doornekamp (3) y Guerra (13) –inicial-, Willis (2), Sastre (6), Shermadini (8), Huertas (19) y Abromaitis (13).
74. Dreamland Gran Canaria 74 (12+20+23+19): Albicy (9), Thomasson (9), Shurna (3), Brussino (2) y Tobey (11) –inicial-, Conditt (5), Homesley (15), Salvo (3), Alocen (6), Diop (-), Kljajic (-) y Pelos (11).
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