Granca activa el modo europeo para tratar de cazar la primera plaza de su grupo este miércoles (20.00 horas) frente a Buducnost y desquitarse del palo sufrido ante el que era colista de la Liga Endesa
La vida es eso que corre mientras perdemos el tiempo con lamentaciones. «Por qué caemos? Para aprender a levantarnos», le dice Alfred Pennyworth a Bruce Wayne en Batman Begins. Caer para levantarse. Una y otra vez. Las veces que hagan falta. Ningún golpe puede doler más que la rendición. El tropiezo con estrépito del Granca el pasado domingo ante el que era colista de la ACB, el Río Breogán (73-82), solo puede servir como motivación para lo que venga. No hay que dar nunca las cosas por hecho. Tampoco dejar de pelear. El conjunto amarillo espera haber aprendido la lección y poder resarcirse en la EuroCup.
Con la primera plaza del Grupo A de la competición continental en juego, el Dreamland Gran Canaria quiere ofrecer su mejor versión en casa. Ya sus aficionados quedaron helados en el piscinazo ante Breogán y animarán para tratar de cosechar una victoria revitalizante.
Es más, un triunfo casi que aseguraría la participación de los de Jaka Lakovic en el playoff al título. A la caza de la primera posición de la tabla clasificatoria, que ahora mismo ocupa Bahcesehir Istambul -una sola derrota y nueve victorias- el CB Gran Canaria se enfrenta ante un rival al que le tiene comida la tostada.
En el histórico de enfrentamientos, los isleños cuentan con un 10-1 a su favor. Los montenegrinos, además, nunca han ganado en el Arena. Su única victoria fue en sus dominios.
El Granca se impuso en la primera vuelta a Buducnost por 86-89 gracias a una estelar actución de Homesley, que firmó 23 puntos para asaltar Podgorica. Mientras los amarillos vienen luego de tres victorias seguidas en la competición, los visitantes cayeron ante el Besitkas (88-90) en la última cita.
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