Anna Pirozzi está muy contenta por regresar a la temporada de ópera de Las Palmas de Gran Canaria, ya que tras el éxito cosechado el año pasado con 'Lady Macbeth', esta semana el público de la isla puede verla en un registro muy diferente, en la piel de la Elvira de 'Ernani', también de Verdi. En la segunda función de este jueves y de nuevo el sábado, siempre a las 20.00 horas, en el Teatro Pérez Galdós, encabezará un reparto en el que también figuran Roberto Aronica, Alessandro Luongo y Evgeny Stavinsky, entre otros. Guillermo García Calvo dirige a la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria.
-¿Qué Elvira cobra vida de su mano en este montaje de 'Ernani', en el Teatro Pérez Galdós?
-Es una Elvira muy clásica. Estoy muy feliz de poder cantarla porque es una ópera que no se hace mucho, porque requiere cuatro cantantes con voces muy importantes. Es la tercera vez que la encarno. Se trata en esta ocasión de una Elvira muy fuerte, correosa y noble. Está enamorada de su Ernani.
«Elvira es complicada de cantar, requiere una voz compleja, dramática y con profundidad»
anna pirozzi
-Ningún rol verdiano es sencillo desde un punto de vista vocal, ¿pero Elvira es especialmente complicada?
-Es uno de los roles primeros de Verdi y es muy complicada. Requiere una voz muy compleja, dramática y con profundidad. Es muy difícil en los 'concertantes', cuando todos los cantantes están juntos. Elvira siempre tiene que estar siempre 'arriba', pero es un rol en el que yo me encuentro muy a gusto.
-La última vez que la vimos aquí fue el pasado año con 'Lady Macbeth'. Con esta Elvira, ¿el público de la temporada de ópera de la capital grancanaria podrá ver gracias a ambos papeles todas sus posibilidades vocales?
-Sí, porque se trata de dos roles con caracteres muy distintos. Elvira es muy romántica y enamoradiza, frente a una Macbeth que es todo fuerza y sangre. Mi voz es muy dúctil, lo que me permite cantar el dúo romántico del final de 'Ernani', que es bellísimo y muy romántico. Con este nuevo papel puedo mostrar al público de aquí que mi voz no es solo potencia y dramatismo, como en 'Lady Macbeth'. Puedo mostrar todos los colores de mi voz y me hace muy feliz hacerlo ante el mismo público.
-¿Qué recuerdos guarda del 'Lady Macbeth' del pasado año?
-Tengo buenos recuerdos, pero es cierto que fue muy extraño por la situación sanitaria. Los cantantes no podíamos tocarnos, teníamos que utilizar mascarillas en todo momento... Pero la compañía fue muy buena y la ciudad y la isla me gustan mucho. El que fuera en el Auditorio hizo que añorásemos una escenografía como la que se puede montar en este teatro, pero fue una producción muy distinta y de la que también aprendí mucho.
Anna Pirozzi, en el ensayo general de 'Ernani', junto a Roberto Aronica.
cober servicios audiovisuales
-Entiendo que está contenta de poder cantar en un teatro ideal para la ópera como es el Pérez Galdós.
-Sí, totalmente. Es un cambio absoluto. El cantante nace en el teatro. La voz está, pero si no está el teatro, la experiencia no es completa. Estoy muy feliz de actuar en una 'Ernani' que cuenta con una escenografía clásica. Amo las escenografías clásicas. Me encanta ponerme vestidos bellísimos de época, porque me ayudan a transformarme en los personajes. En este caso, en Elvira.
-¿Se ha encontrado algo 'perdida' en propuestas innovadoras y de vanguardia?
-Para mí es importante vivir la época, esas constumbres que figuran en el libreto original y que son propias de aquellos tiempos. Eso genera otra interpretación, unos sentimientos distintos.
-Antes de las representaciones del año pasado de 'Lady Macbeth' comentaba que las actuaciones en 'streaming', sin público presente en la sala de conciertos, le habían parecido una experiencia horrible. ¿Cómo está llevando ahora la vuelta a la antigua normalidad sobre el escenario?
-Me alegra muchísimo, sí, pero aún lamento que el coro en estas representaciones de 'Ernani' cante con mascarillas. No soy capaz de entender bien todas sus palabras, cuando mi personaje interactúa mucho con ellos. El público tampoco puede disfrutarlo de la misma manera, pero la situación es la que es y nos toca asumirlo.
-¿A nivel profesional ha recuperado todos sus compromisos en los teatros europeos?
-Sí, todo normal. En Italia hay todavía muchas medidas de precaución, con test previos y mascarillas durante todos los ensayos. En el resto, todo normal y por suerte tengo el calendario de actuaciones completo.
-¿Tiene previsto estrenar algún nuevo rol próximamente?
-Este año, no. Pero sí que tengo previsto lo que será un debut muy importante en una casa nueva para mí, como es la Ópera de la Bastilla de París. En diciembre, con 'La Forza del destino'. Me hace muchísima ilusión.
-¿Considera que el repertorio que se ajusta a sus características vocales ya lo tiene completado?
-No. Sueño y espero en un futuro cantar 'Madama Butterfly' y volver a cantar 'Don Carlo', que he hecho en una sola ocasión. Fue durante la pandemia, sin público y en forma de concierto. Quiero cantarlo de nuevo con público y con una escenografía tradicional, porque para mí es como si no lo hubiera cantado y es un rol que amo muchísimo
-¿Es consciente de que algunos roles no los cantará jamás porque no se ajustan a su voz y que otros requieren de una madurez vocal y personal que se adquieren con el paso del tiempo?
-Así es. Ahora soy muy madura (risas) y puedo cantar Elisabetta de 'Don Carlo' como se tiene que cantar. Lo mismo con Elvira. Ahora es muy usual que todo el mundo cante de todo. Te encuentras con jóvenes cantantes que afrontan Elvira de 'Ernani'. Y lo pasan muy mal y eso puede acabar con su carrera y sus capacidades vocales. Hay que seguir lo que nos indica la naturaleza y la propia técnica vocal. Pero ahora el mundo de la ópera actúa al revés. Me gustaría cantar 'Lucia di Lammermoor', pero no es para mí. Una Mimí, de 'La Bohème', sí que creo que la puedo cantar.
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.