

Secciones
Servicios
Destacamos
El verano de 2011 marcó un antes y un después en mi vida al disfrutar de un rincón mágico en el archipiélago que descubrí algunos años antes, pero que nunca pude explorar como merecía. Nací y crecí en Gran Canaria, pero Lanzarote se hizo un hueco en mi corazón desde el principio. Viajé por disfrute y descanso, pero por las vueltas que da todo vine a encontrar Caleta de Famara por motivos laborales. Una incursión fugaz que dejó esas ganas de más, de una conexión que tenía que pasar a un siguiente nivel con la tranquilidad adecuada y con el entusiasmo que solo un isleño sabe valorar.
Formé parte de la organización del Campeonato de España Infantil de baloncesto que tuvo una de sus sedes, la principal, en la inigualable Villa de Teguise. Mucha cultura y belleza en sus calles. Esa paz que te extrapola para soñar y te aleja del ruido de las grandes ciudades. Entre pisadas y visitas, una vecina me recomendó el pueblo pesquero de Caleta de Famara para ver y comer en un descanso del torneo.
Ahí recordé el flechazo con un rincón con un encanto infinito. El pueblo de Caleta de Famara es para gozar de principio a fin. Ubicado a los pies de imponente Risco de Famara, un mirador natural único y con unas vistas privilegiadas para acechar a La Graciosa, la octava isla, admirar un atardecer para el recuerdo o practicar parapente, entre otras cosas.
Calles de arena blanca y muchas casas típicas canarias multiplican la necesidad de adentrarse sin límite de tiempo. Muchos restaurantes dan sentido a la oferta, al igual que las tiendas y las escuelas para iniciarse en el surf o en el kitesurf. Porque Caleta de Famara puede presumir de dos playas que marcan la diferencia en Lanzarote.
Por un lado, la playa de Famara es la joya de la corona, una de las playas más bonitas de la isla conejera. Rodeada por acantilados impresionantes, su calma, su arena dorada y el respeto del viento posibilitan que mucha gente dé sus primeros pasos sobre las olas. Un spot único y para perderse sin pensárselo. Y teniendo muy presente el atardecer que acerca a propios y a extraños, a vecinos y a turistas encandilados.
La fusión de la naturaleza y el deporte en estado puro. El baño desde la calma y el surf como el comienzo de algo más grande. Porque la playa de Famara permite combinar el descanso y la acción.
Por otro lado, la playa de San Juan es un desafío contra las olas. Si la playa de Famara simboliza la calma, esta está orientada a las maniobras imposibles. Un spot que acogió grandes pruebas del circuito mundial en su momento.
Lanzarote | Caleta de Famara se ubica en el extremo sur de la playa de Famara, que se extiende a los pies del imponente Risco de Famara, ubicada en la costa occidental del municipio lanzaroteño de La Villa de Teguise. Se comunica con Arrecife por la carretera LZ-401.
Publicidad
Cristina Cándido y Álex Sánchez
Lucía Palacios | Madrid
Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.