La Audiencia Nacional se opone a la quinta playa en Costa Teguise

La posible quinta playa de Costa Teguise, artificial, en una zona relativamente próxima a Los Ancones, no cuenta el respaldo de la Audiencia Nacional. En sentencia de finales de enero, a través de la Sala de lo Contencioso-Administrativo, se rechaza el recurso presentado contra la mercantil Tourin Europeo, validándose así la negativa de la a Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar.

El pronunciamiento, donde se impone el abono de las costas a la parte recurrente, no significa que quede cerrado el litigio; toda vez que deja abierta la posibilidad de anunciar un recurso de casación ante el Tribunal Supremo (TS). Hasta comienzos de marzo habrá de plazo para ello.

La negativa a esta playa artificial se basa, entre otros aspectos, en que «la construcción de esa playa artificial ni tan siquiera da respuesta a una necesidad ciudadana, a una demanda social por el uso de playas al existir en la localidad al menos cuatro playas, una de ellas natural, dos artificiales y una cuarta donde han sido necesarias obras marítimas para la consolidación de la arena».

Además, se plantea en la sentencia que «la playa artificial pretendida ineludiblemente altera el entorno, produce efectos ambientales y desde luego su construcción no puede ser posible cuando no se protegen y mejoran los ecosistemas y hábitats existentes». Con ello se tienen presentes los argumentos estatales.

También se matiza que «es evidente que la creación de una playa artificial debe de tener un interés público y no solo un aumento de valor al hotel proyectado en los terrenos colindantes», en referencia al establecimiento de cinco estrellas que se está levantando en la zona. Este nuevo complejo, de cinco estrellas, cabe concretar que va con retraso respecto a las fechas marcadas en el arranque de la construcción; si bien la propiedad mantiene el propósito de que prospere, como hace pocas semanas se contó por CANARIAS7. A priori se espera que pueda estrenarse en 2024.

Cabe recordar que esta playa cuenta con posición contraria de la Fundación César Manrique (FCM), por entenderse que se trata de un proyecto carente de interés público. Similares argumentos se plantearon por diversas administraciones públicas.

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La empresa planteó en su día invertir 2 millones de euros, para cubrir el traslado de la arena necesaria, desde territorio continental africano. Al menos 20.500 metros cúbicos de jable, a extender en una superficie de algo más 26.600 metros cuadrados de terreno. La concesión de la playa se pidió el 3 de octubre de 2017.