
La Aldea de San Nicolás se levantó soliviantada la mañana de este viernes. Numerosos coches en el casco y en Los Molinos sufrieron serios daños durante la pasada madrugada fruto de una acción en la que se mezclan el vandalismo y los robos. La mayor parte de los vehículos presentaban lunas rotas. El Ayuntamiento cifró en una treintena el número de automóviles afectados. La Guardia Civil, por su parte, tiene constancia de 17 e informó de que ha iniciado una investigación. Por lo pronto, agentes de la Benemérita y de la Policía Local se han pasado toda la mañana tramitando las denuncias.
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El alcalde Víctor Hernández, quien recordó que hace ya un par de años sucedió algo similar, indicó que la misma mañana de este viernes contactó con la subdelegada del Gobierno en Canarias, Teresa Mayans, para insistirle en la necesidad de dotar de más efectivos a la Guardia Civil de La Aldea. Asegura el regidor que en algunos turnos cuenta con una sola unidad para toda la comarca.
Por su parte, un clima de indignación se ha extendido entre los vecinos, máxime cuando, según apuntan algunos afectados, tienen serias sospechas de quiénes han podido ser los autores. Por eso, reclaman celeridad en la respuesta. Hablan de dos personas, una de ellas procedente de un municipio cercano.
Por los datos que manejan estas mismas fuentes, los presuntos responsables han dejado huellas de sus pasos: usaron una tarjeta robada para poner combustible en una gasolinera y lo intentaron con otra en un supermercado, pero desistieron de la compra cuando el dispositivo les requirió el PIN.
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