Yino Alemán, en huelga de hambre porque no le internan en el módulo de mujeres de Juan Grande

Agustín Alemán Barreto, conocido por Yino, ha anunciado que va a comenzar una huelga de hambre después de que la dirección del Centro Penitenciario Las Palmas II decidiera su ingreso en el módulo de máximo respeto -masculino- y no en el de mujeres, como él pretendía tras haber tramitado recientemente un cambio registral de sexo, por lo que ahora es una mujer.

Alemán fue detenido en el marco de la Operación Íncubo desarrollada por la Policía Canaria y el Juzgado de Violencia contra la Infancia y la Adolescencia -instrucción 3 de la capital grancanaria-, que desmanteló una presunta red dedicada a la captación de menores para la explotación sexual, inducción a la prostitución y el tráfico de drogas.

Yino Alemán, según las pesquisas, era el cabecilla de esta trama y por eso fue enviado a prisión provisional junto a José Luis S.P., mientras que otras dos personas salieron en libertad. Todos están siendo investigados por delitos contra la indemnidad sexual cometidos sobre menores de 16 años, agresión sexual, abuso sexual, inducción a la prostitución y explotación sexual y contra la salud pública.

Yino Alemán fue trasladado el miércoles a la cárcel de Juan Grande y durmió en el módulo de ingresos hasta que la mañana de este jueves fue evaluado por el equipo técnico. Desde el primer momento se mostró muy poco colaborador e incluso tuvo problemas con los agentes de policía que se encargaron de su traslado a la Ciudad de la Justicia y luego al centro penitenciario. Ya en prisión, pidió que fuera cacheado por una mujer y no por un hombre y, de inmediato, activaron el protocolo de prevención de suicidios que le asigna a un interno de apoyo constante, algo bastante habitual en los delincuentes sexuales.

En primera instancia, la dirección del centro determinó que Alemán ingresara en el módulo 1, o más conocido como el de máximo respeto y no en el de mujeres, a pesar de su reciente cambio de sexo. Todo ello ajustándose al protocolo de integración penitenciaria de personas transexuales que establece como criterio para elegir el módulo de destino del reo el de la «identidad sexual aparente» de estas personas, tomando en consideración sus caracteres fisiológicos y su apariencia externa.

Esto provocó una brusca reacción por su parte y anunció que iba a ponerse en huelga de hambre como medida de protesta ante lo que consideraba que era una decisión injusta. Yino Alemán, a pesar de que ahora es mujer y quiere estar en el módulo femenino, ha insistido en que quiere que le sigan llamando por su sobrenombre o por Agustín.

Los internos que permanecen en dicho módulo de máximo respeto tienen que firmar un contrato y aceptar una serie de normas de convivencia, están sometidos a recuentos de pie, tienen que tener la cama hecha, van rotando a la hora de hacer trabajos interiores, etcétera. Un alto porcentaje de estos presos han cometido delitos sexuales pero los técnicos entienden que se pueden comportar de manera correcta dentro de la prisión.

Los responsables de la Operación Íncubo detuvieron a cuatro personas de las que dos están en prisión. Se les investiga por captar a menores en situación de vulnerabilidad de varios municipios de la isla para luego inducirlas a la prostitución con adultos. Los agentes realizaron cinco entradas y registros en Santa Lucía de Tirajana, Agüimes, Telde y Las Palmas de Gran Canaria y no descartan que haya más víctimas y personas implicadas. También hay pruebas de la presunta comisión de agresiones sexuales cometidas sobre los menores de edad por parte de los investigados. El caso está bajo secreto de sumario.

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