
Secciones
Servicios
Destacamos
La salida de Ángel Sabroso rumbo a la Viceconsejería de Actividad Física y Deportes deja huérfano al pleno municipal de uno de los concejales con un mayor conocimiento de la vida administrativa de la ciudad, de la que es protagonista, alternando tareas de gobierno y oposición, desde el año 2006. Casi dos décadas dedicadas al oficio del municipalismo.
Este viernes dijo adiós al Salón Dorado de las Casas Consistoriales, allí donde su voz ha resonado tantas veces en plenos complejos y ha protagonizado muchos intercambios dialécticos con sus contrincantes políticos. Todo ello «por el amor a mi ciudad», subrayaba en una intervención de nueve minutos de alocución en la que agradeció a todos los integrantes del Pleno a los largos de estos años el trabajo por la capital.
Se extingue de esta forma una relación larga, y a veces tortuosa, en la que el ya exedil del Partido Popular se ha convertido en el rostro con el que la ciudadanía vinculaba a su formación en la vida municipal sin que ello hiciera cristalizar en el seno conservador la idea de situarle como cabeza de lista en una plancha electoral. En la trayectoria municipal de Sabroso encaja muy bien aquella cita del primer ministro italiano Giulio Andreotti: «El poder desgasta, sobre todo al que no lo tiene».
Sabroso llegó al pleno a finales de 2006 con las responsabilidad de Playas. Bajo su gobierno en la concejalía nacieron ideas como el Belén de Arena de Las Canteras, hoy postal fija de la ciudad en la temporada navideña. Fue en los años finales del mandato de Pepa Luzardo, cuando tras doce años de gobiernos populares consecutivas el PSOE, con Jerónimo Saavedra como candidato, arrancó a la formación de la calle Albareda el que hasta entonces era uno de sus feudos inexpugnables. «Pepa, contigo empezó todo», indicó en su salva de agradecimientos el ya exconcejal.
Ese giro de guion ha marcado la presencia de Sabroso en las oficinas del antiguo Hotel Metropole. Desde entonces, solo ha estado en responsabilidades de gestión en un mandato (2011-2015) y eso le ha situado como la voz principal de la oposición en la capital durante muchos años a pesar de que su partido le ha alineado en las papeletas por detrás de Cardona, Luzardo y Jimena Delgado. Incluso el efímero intento de pelear la alcaldía a Hidalgo con María Salud Gil, extravagante y errático y con duras secuelas electorales.
Su etapa como concejal de gobierno durante la alcaldía de Juan José Cardona le otorgó las responsabilidades de Primer Teniente Alcalde y concejal de Movilidad y Medio Ambiente, Parques y Jardines y Alumbrado. Fue su segundo cometido. Primero estuvo al frente de Seguridad en un breve y accidentado periodo de tiempo. Aquella etapa de seis meses estuvo protagonizada por un conflicto laboral con la Policía Local de la ciudad y salpicado por varios accidentes con armamento protagonizados por agentes municipales.
Esa etapa destaca, no obstante, por la reorganización de la Movilidad en la ciudad. Bajo su mando se impulso una reestructuración de líneas en Guaguas Municipales que, una década después, apenas se ha modificado. También gestionó la confección y puesta en funcionamiento del Plan Director de la Bicicleta o la instalación en la entrada norte de la ciudad del aparcamiento Intermodal de El Rincón. Medidas de las que él presume en su currículo pero que en su momento también fueron motivo de contestación popular, con la expansión de la zona azul y el aterrizaje de la verde.
Fue la etapa más relevante de su vida política. En ella se detuvo durante su intervención de despedida del pleno. «Quiero acordarme de Juan José Cardona. Él empezó siendo un compañero de partido, luego mi jefe y acabó siendo un amigo. Aquella etapa la recordaré siempre por la enseñanza de gestión que supuso hacer tantas cosas con tan poco dinero como el que teníamos», subrayó.
Sabroso es un hombre tenaz y entregado a sus proyectos. Eso se consigna entre sus virtudes y también entre sus defectos, con poca cintura en las discrepancias. Su lealtad al partido en el que milita desde 1996 (fue presidente de Nuevas Generaciones) le ha situado a su vez en posiciones incómodas y le ha relegado a un segundo plano, generando un eterno debate sobre cuándo llegaría el momento de proponerle para la Alcaldía.
El nuevo viceconsejero del ejecutivo regional deja el Ayuntamiento tras 18 años en los pasillos del Ayuntamiento, de donde conoce dónde se ramifica cada tubería. Áspero en sus intervenciones en el Pleno, crudo en sus opiniones públicas. Esa forma de expresar aquello que opina también le ha generado un rechazo frontal en aquellos que no comparten su forma de pensar. Fuera. Y también dentro de su partido.
Publicidad
Cristina Cándido y Álex Sánchez
Lucía Palacios | Madrid
Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.