La playa de las Canteras, situada al nordeste de Gran Canaria, es un paseo amable y cosmopolita abierto al mar que está perfectamente conectado entre sí. Más de tres kilómetros de extensión de arena fina y dorada que bordea la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria junto a una avenida que invita a una infinidad de opciones para el ocio de sus caminantes. Una temperatura media de 23 grados reside constantemente en la isla redonda, tal y como lo indica el reloj-termómetro ubicado a lo largo del paseo de Las Canteras. La combinación de una decoración que mezcla estilos canarios y anglosajones acentúa la sensación de estar en un entorno semitropical. Huele a verano en primavera.
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El sol se cierne sobre Auditorio Alfredo Kraus, que da inicio al camino de esta emblemática playa canaria. El deporte cobra vida en la zona Cícer y, para muchos, es el lugar donde el hambre hace reclamo y nos lleva hasta la zona de Punta Brava, en la que Ca' Manolo nos ofrece su distintivo bocadillo de calamares para dar el gusto al paladar.
No hay que pensar mucho más allá para decidirse por el postre: los helados de Peña la Vieja nos aportan la energía suficiente para continuar la ruta por Playa Chica. Entre ambos rincones, casi como Egipto, bajo la arena se encuentra un tesoro. Una puerta al pasado; son los Lisos. Unas rocas formadas hace 136.000 años, indiscutiblemente parte del patrimonio geológico de esta ciudad al conservarse como los vestigios de la historia de las Canteras.
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Enseguida se alcanza la zona conocida como Playa Grande, en la que si prestamos especial atención avistamos aguas más tranquilas y una arena más rubia que nos traslada al final de la playa. La Puntilla, reconocida por sus numerosos bares y restaurantes donde el pescado suele ser el ingrediente principal y la comida canaria, la especialidad. Nos encontramos ante el sitio idóneo para rematar el camino con un aperitivo frente al mar. Es ahora cuando el colorido toma el cielo: el rojo, naranja e incluso el rosa se juntan en el horizonte durante esta víspera de la jornada, lo que nos invita a observar un cuadro que plasma una acuarela perfecta frente al ojo humano.
Quien no haya contemplado un atardecer en Las Canteras se pierde una obra de arte. Y si gozamos de un cielo limpio y día despejado, el sol se esconde tras las cumbres para dar lugar a un encuentro con Tenerife a través de la magnificente figura del Teide.
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Gran Canaria | Se puede ir en coche desde el aeropuerto por la autopista GC-1 y aparcar por la zona Mesa y López, centro comercial Las Arenas o alrededores. Otra opción es la utilización del transporte público, con destino Santa Catalina. Lo ideal de esta ruta es que se puede realizar en cualquier época del año, ya que la temperatura acompaña la capital durante toda la temporada anual.
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