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La playa de Las Canteras no tiene un exceso de arena. Los estudios realizados por el equipo del profesor Ignacio Alonso Bilbao, de la facultad de Ciencias del Mar de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), demuestran que el sistema en conjunto está en una situación de equilibrio y, por tanto, cualquier operación de extracción de sedimentos resulta totalmente desaconsejable. «En la última década apenas se acumula sedimento», expuso el científico, «el balance neto de la playa es de cero, es decir, ni gana ni pierde arena«.
Lo que ocurre es que la dinámica de depósito de la arena es diferente en función del punto de la playa de Las Canteras que se analice. Así, mientras en La Puntilla y en la Playa Grande se acumula el sedimento, en el entorno de La Cícer se va perdiendo arena.
En general, la playa de Las Canteras se mueve entre una aportación de 400 metros cúbicos al año y una pérdida de unos 600 metros cúbicos, dependiendo de la estación. Eso sí, por zonas, hay grandes diferencias:el arco norte acumula entre 2.000 y 3.500 metros cúbicos anuales, lo que se refleja en un crecimiento en altura y en una reducción del espacio que hay entre el arenal y el paseo; por contra, el arco sur pierde entre 2.500 y 4.000 metros cúbicos anuales.
«A lo mejor, lo que hace falta es redistribuir la arena, pero, desde luego, no volver a sacarla fuera del sistema«, prosiguió Alonso Bilbao, »desde mi punto de vista, sería un error, y más en un escenario de cambio climático, de subida del nivel del mar en el que estamos«.
El profesor de Ciencias del Mar señaló la importancia de que la playa de Las Canteras siga manteniendo un equilibrio en la cantidad de arena disponible. «A nivel global, la inmensa mayoría de las playas está en erosión y tener una playa como la nuestra, que se mantiene y no va perdiendo arena, es un valor enorme del que no somos conscientes«, expuso.
«No cometamos errores, no volvamos a sacar arena del sistema y, como mucho, redistribuyámosla dentro«, añadió.
En 2003 y en 2009, la Dirección General de Costas extrajo arena de Las Canteras y la depositó en Las Alcaravaneras (34.000 metros cúbicos) y El Veril (56.000 metros cúbicos), respectivamente.
Desde entonces, no se ha repetido más esta operación porque se ha constatado que la aportación de arena es cada vez menor.
El origen de la arena que conforma la playa de Las Canteras está en unos campos sedimentarios sumergidos de la bahía del Confital. El científico apuntó la necesidad de estudiar estos puntos porque «a lo mejor, lo que ocurre es que esos campos sumergidos se están agotando y, entonces, ya no tenemos la fuente de sedimento».
La dinámica natural del sistema dunar consiste en la producción de la arena en esos fondos del Confital y su traslado hasta Las Canteras. Una vez allí, se seca, y el viento la traslada desde La Cícer a La Puntilla, donde se va depositando. Hasta la construcción de los edificios de la playa y del resto de la ciudad, esta arena llegaba hasta Las Alcaravaneras y formaba el campo dunar que ocupaba lo que hoy es Mesa y López y alrededores. Sin embargo, la urbanización de todo el istmo interrumpió esta dinámica y propició que la arena acortara su viaje en Las Canteras.
En opinión de Alonso Bilbao, se debería hacer un estudio de los efectos que tendría el trasvase interno de la arena en Las Canteras, desde Playa Grande a La Cícer, para luego decidir si este tipo de operaciones se realiza de manera periódica o no, con qué frecuencia y en qué momento del año. Propuso que esta actuación se hiciera con una cantidad que oscila entre los 10.000 y los 15.000 metros cúbicos, aproximadamente.
Ignacio Alonso Bilbao hizo estas declaraciones en unas jornadas técnicas para abordar el balance sedimentario de la playa de Las Canteras, que fueron organizadas por la ULPGC y el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.
A la vista de los aportes científicos, el concejal de Ciudad de Mar del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Pedro Quevedo, se mostró partidario de realizar un trasvase de arena dentro del sistema de Las Canteras y descartó volver a sacar sedimento de la playa.
«Aquello de llevarse arena a otros sitios no debe volver a ocurrir», dijo el edil, «lo que se ha discutido en esta sesión no caerá en saco roto».
Por eso, se va a solicitar a Costas la redistribución de la arena, entre 10.000 y 15.000 metros cúbicos, con el objetivo de mejorar la gestión, el uso social y la preservación de este espacio.
La decana de Ciencias del Mar, María Esther Torres, resaltó la importancia de la playa de Las Canteras como «nuestro parque y nuestro laboratorio». Y resaltó que es «una playa viva a todos los niveles».
Durante el encuentro se conoció otros casos de gestión del litoral desarrollados por la Universidad del Algarve (Susana Costas) y el proyecto LIFE Adapt Cala Millor: del Servei de Canvi Climátic i Atmosfera del Gobierno de Baleares (Jinámar Tomás Ribot).
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