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La enfermedad no frena el viaje de Marta

Hastiados por la rutina y el estrés diario, y ante la posibilidad de no poder cumplir sus sueños debido a una enfermedad degenerativa, esta canaria y Chemi, su marido, se lanzaron a la aventura en 2017 recorriendo el mundo con triciclos reclinados.

Viernes, 17 de julio 2020, 01:05

Marta Quevedo, (49 años, Las Palmas de Gran Canaria) padece una enfermedad degenerativa neuromuscular que se llama Charcot–Marie–Tooth (CMT). Pero lejos de compadecerse decidió darle un giro a su vida hace poco más de un año y le lanzó un órdago al diagnóstico que le auguró un futuro vinculado a una silla de ruedas.

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Realmente no fue su firme resistencia a la enfermedad la que le impulsó a cumplir sus sueños cuanto antes. Fue la necesidad de romper con la rutina, las necesidades impuestas por el consumismo y el estrés del trabajo diario (Marta era comercial) lo que le animó junto a su pareja, José Miguel Navarro, Chemi (52 años, Cádiz e ingeniero de profesión), lo que les motivó a vivir pedaleando hasta que las fuerzas se lo permitan. «Con una bicicleta normal no podía hacer esta aventura que nos hemos planteado porque noto que cada vez tengo menos fuerza y equilibrio. Por lo que optamos por un trike, los triciclos reclinados. El mío tiene un motor de ayuda a la pedaleada en los momentos de mayor dificultad», afirma Marta, que destaca la sensación de libertad y el contacto con la naturaleza con el triciclo. «Fuimos a probarlos a Madrid, porque por entonces en Canarias no había ninguna empresa, y como íbamos a tener problemas con el envío a las islas, decidimos irnos a Huelva rodando. Allí tomamos un barco, y llegamos a Tenerife», recuerda Chemi, reconociendo que aquel viaje de regreso a las islas les cambió definitivamente la manera de entender y encarar la vida.

«Al principio teníamos la incertidumbre de cómo sería un viaje tan largo por la carretera. Pero nos quedábamos en tiendas de campaña, hostales o, gracias a la comunidad mundial de acogida de ciclistas (Warmshower), también dormíamos en alojamientos cedidos desinteresadamente a ciclistas en ruta. Cuando llegamos a casa después de un mes, previa escala en Lanzarote y Gran Canaria, ya teníamos claro que queríamos vivir así el resto de nuestras vidas», afirma feliz Marta.

Después de rodar por las islas, de acumular kilometraje suficiente en las piernas y vivencias en las carreteras canarias, ya están preparados para el siguiente reto. A partir del 5 de abril recorrerán media Europa con el objetivo de llegar en verano a Noruega con sus trikes. Sin más prisas que el tiempo que marque el sol cada día. El mapa lo irán dibujando por el camino y sus aventuras las irán plasmando en el canal de Youtube y el blog Viajando con Gofio. «Tenemos que disfrutar del presente. La vida es un regalo», recuerda Marta.

«A pesar de mis limitaciones; si quieres, puedes».

La enfermedad de Charcot es genética y a Marta se la diagnosticaron hace unos 15 años, lo que no le ha limitado en su empeño de cumplir con todos los retos que se ha propuesto. «Esta enfermedad va caminando y de dos o tres años para acá es cuando yo estoy peor, sintiéndome más débil. La gente me dice que estoy loca, que a dónde voy con esta enfermedad; pero, a pesar de mi discapacidad, quiero decirle a todo el mundo que si quieres, puedes conseguirlo», afirma Marta, quien no se da por vencida con el apoyo de Chemi. «Cuando el médico le diagnosticó la enfermedad le dijo que se fuera mentalizando a quedarse en silla de ruedas, por lo que esta aventura es una manera de protestar contra ese vaticinio. Es una manera de rebelarse ante la enfermedad y reivindicar la vida. No te puedes hundir ante un diagnóstico, no te puedes quedar sentada hasta quedarte en una silla de ruedas. Hasta que tengamos los dos fuerzas vamos a seguir recorriendo el mundo pedaleando. Y cuando se acaben las fuerzas buscaremos la fórmula de seguir para adelante y seguir disfrutando de la aventura y el vivir intensamente día a día», dice Chemi, que anima a cambiar el sentido de la vida. «Nadie se creía lo que hicimos en junio desde Madrid, la familia y nuestros hijos Marta y Jose no apostaban mucho por nosotros... (ríe Marta), pero lo conseguimos y estamos preparados para vivir nuevas aventuras tras recorrer muchos kilómetros también por las islas».

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Precisamente la siguiente les llevará a recorrer Europa. «Saldremos el 5 de abril en barco, llegaremos el 6 a Huelva y de ahí emprenderemos el viaje a Noruega en bicicleta. Tenemos una ruta más o menos marcada que nos hará pasar por Francia, Bélgica, Holanda, Alemania y Dinamarca hasta nuestro destino, pero no queremos ser rígidos con el itinerario porque queremos vivir el presente. Haremos rutas de nos más de 50 kilómetros diarios, pero no tenemos prisa, tenemos hasta agosto para llegar», calculan Marta y Chemi.

Primer viaje.

Tras comprar sus trikes -«mi bici cuesta lo mismo que una televisión plana», compara divertida el precio Marta- ambos recorrieron el pasado mes de junio la península desde Madrid a Huelva (en las imágenes) en un viaje a las islas que duró un mes hasta Tenerife, donde residen esta grancanaria y gaditano, ambos movidos por la aventura.

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Seguridad.

Al igual que con una bicicleta común, los conductores de vehículos deben mantener una distancia de un metro y medio de distancia con respecto a un ciclista de trike. «No hemos pasado miedo hasta ahora en la carretera, la gente nos respeta mucho y nos ayuda. Además, nosotros somos muy prudentes y no vamos a mucha velocidad».

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