Jémez llega con escoba: Pide cinco o seis bajas

Paco Jémez ya trabaja como entrenador de la UD. Aunque ha decidido de manera unilateral prolongar sus vacaciones hasta después de las fechas navideñas, licencia para muchos incomprensible por el delicado momento del equipo pero que el club le ha tolerado, el preparador está aprovechando el paréntesis para evaluar las posibilidades de la plantilla y su diagnóstico es demoledor. Jémez pretende varios fichajes y, además, la marcha de futbolistas que no le valen ni por rendimiento ni por competencia. Así, ya ha trasladado a la dirigencia las gestiones que se han de emprender para remendar un equipo con muchas carencias y necesidad de retoques. Ahí quedan retratados Toni Cruz y Luis Helguera, cuya política de incorporaciones en verano se está destapando como fallida hasta el colmo de que ni siquiera un caballo ganador seguro como era Vitolo terminó de rendir como se esperaba, lesiones de por medio.

Ahora, a los ejecutivos de máxima confianza de Ramírez les queda la papeleta de dar puerta a algunos jugadores por los que apostaron meses atrás o, en otros casos, a los que decidieron mantener en nómina. Con Vitolo en el Atlético de Madrid y una ficha libre por cubrir, hay que hacer sitio y ahí comienza la purga. La lista de la compra invernal abarca todas las posiciones, incluyendo la portería, e implicará varios finiquitos. El primero podría ser el del italiano Aquilani, desaparecido en combate en las últimas jornadas y que ya busca una salida. Jémez quiere potenciar la medular y Aquilani para nada entra en sus preferencias. Y ojo a Samper, que, aunque es de su gusto, a la vista de su aportación testimonial tampoco está libre de entrar en el lote. Aquilani y Samper fueron dos de las novedades de esta temporada y, hasta la fecha, apenas han dejado huella. Al igual que Tannane y Hernán Toledo, quienes no terminan de convencer.

Veteranos como Aythami Artiles o David García también alimentan debates. Son hombres de club y se les valora por su amplia trayectoria en la casa, pero la coyuntura apremia y no hay sitio para concesiones nostálgicas. Miguel Ángel Ramírez ya conoce los planes de Jémez y le ha dado plenos poderes para que adecúe la UD a su gusto.

En el capítulo de entradas, el técnico entrante podría haber puesto el ojo en el Cruz Azul de México al que dirigió hasta el mes pasado. Hay futbolistas de su confianza y con los que le gustaría contar en su nueva aventura. No quiere más experimentos y apuesta por lo que conoce de primera mano y sabiendo que hay garantías de correspondencia inmediata. El tinerfeño Édgar Méndez, con experiencia en el Alavés, es uno de ellos. En las conversaciones que ha mantenido en los últimos días ha dejado muy claro que la prioridad está en futbolistas que conozcan la competición o, en otro caso, tengan su absoluto beneplácito.

El anuncio del regreso de Paco Jémez llegará una vez jugado el partido ante el Getafe para evitar interferencias y considerando que algunos de los futbolistas que pueden intervenir en este compromiso tienen las horas contadas.

Jesé Rodríguez ha trasladado a Miguel Ángel Ramírez que quiere afrontar el tramo final de la temporada en la UD, después de que su aventura en la Premier, en las filas del Stoke City, no le haya salido como quería y considerando que imperativos familiares le obligan a permanecer en Gran Canaria más tiempo del que podría jugando fuera. A Jémez no le desagrada esta opción, viable porque el PSG, propietario del jugador, sufragaría su sueldo. Pero hay debate en torno al futbolista, que no cuajó el curso pasado y sigue en franco declive. No todos ven conveniente una segunda oportunidad por las dudas que ofrecen sus rutinas lejos del césped y que le han causado problemas extradeportivos. Para el ataque también suena Guidetti (Celta) y se miró por retornar a Araujo, algo inviable porque implicaría pagar al AEK.

• Temas
• Liga de Fútbol Profesional
• UD Las Palmas